La eliminatoria sigue y el cambio de escenario con ella. De nuevo la bahía vuelve a ser el escenario del quinto partido que pondrá con una victoria más a uno de los dos bandos. La aparente recuperación de los líderes de la liga regular frente al corazón y la garra de la escasa rotación de los Cavaliers. Sin duda otro gran aliciente para volver a quedarse despierto ante un encuentro que puede tener la clave del título.
Ruta ascendente
El inicio del viernes no auguraba nada bueno, pero el sorprendente quinteto inicial y la comodidad a lo largo que transcurría el encuentro pusieron de manifiesto todas las armas que tenían escondidas desde el enfrentamiento con los Rockets. Con un juego más espaciado, mejores y más pases y mayor confianza en el tiro y su estilo consiguieron doblegar una fuerte motivación en el Quicken Loans Arena.
Los 31 puntos anotados en el primer cuarto confirmaron las peores pesadillas de los Cavaliers
Y desde luego el acceso al anillo pasa por seguir en esta línea con jugadores tan importantes como Andre Iguodala, el tapado David Lee y los reservas dando señales de vida. Por fin Stephen Curry campó a sus anchas en un encuentro de las Finales, y los triples entraron.
Volver a remar
En Cleveland parecía que el juego a imponer estaba claro, y vencer en esta serie se basaba en presevar un factor de cancha arrebatado a sus rivales. Pero entre el cansancio acumulado, los fallos de los hombres exteriores y un planteamiento erróneo, la eliminatoria vuelve a estar donde se encontraba al inicio. Con el efecto de los de Ohio algo diluido, se consagran para recuperarlo en estos días que han tenido de descanso.
4 de 27 (14.8%) en tiros desde más allá de la línea del 6,75 frente al 40% rival que les pasó por encima
David Blatt sabe que tiene jugadores como J. R. Smith e Iman Shumpert que funcionan a ráfagas, pero no pueden permitirse un partido tan desastroso de los dos hombres más importantes desde el perímetro. También Matthew Dellavedova tuvo un mal día para completar el mal partido.
Los asistentes también existen
En la andadura a lo largo de los playoffs los grandes protagonistas del cuerpo técnico de los Golden State Warriors han sido los entrenadores asistentes, más que Steve Kerr. Frente a Memphis Grizzlies sugirieron emparejar a Andrew Bogut con Tony Allen en defensa, y de esa manera desarbolaron por completo cualquier sistema ofensivo planteado por David Joerger. En esta ocasión la creatividad llevó a Kerr a comenzar el encuentro sin sus pívots formando con: Stephen Curry, Klay Thompson, Harrison Barnes, Andre Iguodala y Draymond Green. Y aunque es verdad que se vieron superados en los rebotes, el espacio que generaron en ataque permitió a los visitantes recuperar sus señas de identidad.
El gigante ruso
A pesar de perder el cuarto encuentro, los Cavaliers se llevaron una gran actuación de su hombre más alto, Timofey Mozgov. El ex de los Denver Nuggets registró su récord en anotación firmando un partido muy completo con 28 puntos y 10 rebotes. Fue el mejor sin duda del combinado local por encima de LeBron James y se erigió como la gran figura en la pintura. En él residen las esperanzas ante una alineación más pequeña por parte rival, a no ser que Blatt decida igualar tal táctica. Muchos se preguntan si merece más minutos, desde luego su aportación en cancha le avala siendo constante partido tras partido.
Siempre en la sombra
Hasta ahora la garra y la determinación la ha puesto un jugador que no parecía determinante al comenzar la temporada, Andre Iguodala. Ha sido capaz de frenar el vendabal ofensivo de James, y aportar en ataque cuando nadie se lo pedía. De esta manera se ganó su primera titularidad de la campaña en el cuarto encuentro volviendo a ser el factor determinante que ha empujado a los Warriors a empatar la serie. Parece que puede volver a repetir formación Kerr aunque siempre es una incógnita. Pero se ha erigido como la figura más completa en ambas facetas del juego, y en la que queda depositada la confianza de volver a ganar en casa.
| Otro sobre LBJ | vs | Iguodala sobre LBJ |
|---|---|---|
| 52 | Minutos | 131 |
| 45.2 | Pts por 48 mins | 34.4 |
| 45.5 | %TC | 35.3 |
| 1.8 | Pérdidas | 4,8 |
| +14 | +/- | -25 |
La ausencia de experiencia
Otro de los factores que entra en juego es la falta de experiencia en ambos bandos sobre la pista. Pero Blatt tiene la venaja de tener figuras como Shawn Marion o Mike Miller, que aunque no disputan apenas minutos, tienen bagaje NBA. Ellos mismos han reclamado mayor protagonismo y podría ser una de las claves para contrarrestar el entusiasmo de los californianos. Ambos cuentan con al menos un título en su haber, y Miller en concreto goza de la química de haber peleado con LeBron James en sus respectivas etapas en Miami.