Cuándo cuento una historia como la de Derrick Rose me viene a la cabeza otra estrella pero de otra disciplina muy distinta, la música. Este mito del sonido llamado Tupac Shakur se asemeja bastante bastante a la vida de DRose, los dos comparten rasgos parecidos. La superación de obstáculos, el encontrar el éxito rápidamente, enfrentarse a distintos contratiempos hace que estas dos personas de estilos diferentes hayan compartido vivencias semejantes.

Los dos artistas nacieron en ambientes ásperos, Rose y Shakur fueron tocados con una barita mágica que les dió un talento de otro mundo, uno lo demostró con una pelota naranja y el otro con una pluma y dicho talento les sacó de la pobreza absoluta. Recientemente Powerade creó un fascinante anuncio en el que Derrick era el protagonista. Dicho anuncio se llamaba "La rosa que crecieron de hormigón" un poema de Tupac que curiosamente se parece a la vida de Derrick Rose.

Derrick Rose fue una rosa que creció en el hormigón de las calles de Chicago y esta rosa penetró el duro asfalto para brillar más que nunca. Los aficionados de los Bulls se quedaron maravillados al contemplar semejante belleza, esta flor no tardó mucho en destacar frente a los demás jugadores y pronto se vió que haría historia en su ciudad. Cuando se hacen tan grandes esfuerzos suele haber daños colaterales y los pétalos de esta flor fueron dañados al romper la dura carretera. Las dos lesiones que sufrió el jugador fueron un signo más de superación a lo largo de su carrera y con la ilusión de un niño el jugador nunca se dio por vencido ante este cúmulo de infortunios.

Ahora un año después se puede decir con la mente en el cielo y los pies en la tierra que el jugador volverá a demostrar un gran nivel. Sin duda el momento cumbre de su temporada fue el triple que anota frente a los Cavs para poner el 2-1 en la eliminatoria y si los pétalos de la rosa aguantan los Bulls de su querida ciudad darán muchas sorpresas.