No sería una exageración decir que la carrera profesional de Jimmer Fredette no se ha dado como él esperaba. El jugador que fue una sensación a nivel nacional tras su paso por la Universidad de BYU no ha podido realizar la transición del básquetbol colegial al básquetbol NBA.
A lo largo de seis temporadas, Fredette ha pasado por tres franquicias -Sacramento Kings, Chicago Bulls y New Orleans Pelicans-, sin dejar demasiados recuerdos positivos. Tan sólo ha sido titular en siete partidos y, hasta ahora, nunca pudo encontrar su lugar en ninguno de sus equipos.
Ahora, el escolta tendrá la chance de participar de la pretemporada junto a San Antonio Spurs. Fredette batallará por ingresar a la plantilla de 15 jugadores que disputarán la temporada regular, en lo que podría ser una de sus últimas chances para tener un futuro en la liga.
Por ello, "Jimmer" ha pasado estos últimos meses intentando afianzar su juego, especializándose en su tiro externo, un común denominador entre los jugadores que le gustan a Gregg Popovich, entrenador de los Spurs.
Además de entrenar por su cuenta, Fredette tuvo la suerte de recibir consejos de Chauncey Billups, ex jugador de la NBA (campeón en 2004 con Detroit Pistons) reconocido por sus dotes de líder. "Fue increíble. Chauncey es una gran persona. Estoy muy agradecido con él porque me pudo enseñar pequeñas cosas que aprendió durante tantos años de competencia", comentó el escolta en declaraciones para CBS.com.
La 'suerte' mencionada se relaciona con el hecho de que Fredette no buscó contactarse con Billups, sino que el contacto se dio por pura casualidad. "Vivo en Denver fuera de temporada y él se acercó a mí para proponerme que vaya a su gimnasio. Obviamente, accedí en ese mismo momento. Haber tenido la oportunidad de aprender de él fue asombroso, remarcó.
Con esta nueva experiencia, Fredette espera poder impresionar a San Antonio durante el 'Training Camp', para ganarse su lugar e intentar revivir una carrera que, por ahora, sigue estancada.