El segundo partido de la temporada 2015-16 venía cargadito de alicientes, ya que Houston Rockets y Golden State Warriors se veían las caras por primera vez desde que disputasen la final de la Conferencia Oeste. El conjunto visitante contaba con la baja de uno de sus jugadores más importantes, Andrew Bogut. Mientras que por parte del conjunto texano, recuperaban al pívot Dwight Howard, quien no estuvo presente en la derrota de la primera jornada frente a los Denver Nuggets.

Primera parte

El primer cuarto comenzaba con el ritmo característico al que los vigentes campeones no tienen acostumbrados. Los primeros compases estuvieron marcados por un ritmo electrizante y rápido, además de una gran carga de anotación, donde ambos equipos no daban el brazo a torcer.A todo esto hay que sumarle el gran ambiente que presentaba el pabellón, y con el cual los Rockets se vieron espoleados. En este primer cuarto, los Golden State Warriors se veían liderados una vez más por un inspirado Stephen Curry, que conseguiría un total de 12 puntos en dicho periodo. Por parte del equipo local, su estrella James Harden no conseguía más que un horrible 2/11 en tiros de campo. Sin embargo, surgió un líder anotador de la chistera. Se trataba del novato Montrezl Harrell, quien se enganchaba al partido anotando 11 puntos, que hacían que los Rockets lograran mantenerse a flote en el partido. Finalmente el cuarto se cerraba con un marcador de 29-30 para los Warriors.

En cuanto al segundo tiempo comenzaba con una tónica similar al anterior, muchos tiros y anotación. Por lo que la defensa brillaba por su ausencia. En este periodo los Houston Rockets comenzaron a perderse en el partido, ya que los jugadores empezaban a quedarse sin opciones en ataque, en parte por la defensa visitante. Además, continuaron fallando tiros y tiros, por lo que la brecha entre ambos equipos comenzó a abrirse. Tanto fue así que se llegó al final de la primera parte con el marcador señalando el resultado 44-57 a favor de los Golden State Warriors.

Segunda parte

Tras el descanso y las charlas en los respectivos vestuarios, los equipos acudieron a la cancha con afán de hacerse con el partido. El equipo texano se vió perjudicado por la ausencia de Terrence Jones, quien tuvo que abandonar la pista por una lesión provocada en un lance del juego. Los Golden State Warriors comenzaron algo espesos, ya que los Houston Rockets llevaron a cabo una defensa más agresiva, y afinaron su puntería, con lo que llegaron a reducir la diferencia a nueve puntos. Pero esto no les duró mucho, ya que los Warriors supieron hacer una buena lectura del partido, y emularon a su rival, comenzaron a realizar su defensa. Esta táctica dio resultado al instante, y poco a poco, comenzaron a distanciarse de nuevo hasta conseguir cerrar el tercer cuarto con 65-81 a favor de los vigentes campeones.

El último cuarto comenzaría con un intento de remontada a la desesperada por parte del equipo local, ya que disponían de tan sólo 12 minutos para remontar un total de 16 puntos de desventaja. Sin embargo, dicha remontada no se materializó, ya que los Golden State Warriors pusieron fin al encuentro por la vía rápida, a base de provocar pérdidas rivales (un total de 17) y conseguir un buen porcentaje en sus tiros. El final del partido transcurrió sin mucha historia desde la mitad de este último periodo, donde el marcador señalaba un 102-82. Por lo que los Houston Rockets cosecharon la que es su segunda derrota de la temporada por 92-112. Por el contrario, los Golden State Warriors conseguían su segunda victoria, ya que ganaron frente a los New Orleans Pelicans.