La temporada regular consta de 82 partidos a disputar por cada equipo contra rivales de una entidad bastante alta. Teniendo esto en cuenta está claro que es una locura juzgar a un equipo exclusivamente por cómo empieza su andadura en la nueva campaña. Aunque es igual de cierto que mejor empezar con buen pie a tener que levantar una losa nada más empezar.
Esto es lo que sucede con los Detroit Pistons que han comenzado esta temporada 2015/2016 generando buenas expectativas, no sólo por el buen juego sino por las victorias generadas. A jugadores cuyo salto de nivel ya se esperaba como Drummond o Reggie Jackson, se han unido las explosiones de calidad de jugadores como Marcus Morris o Kentavious Caldwell-Pope.
Ya avisó su entrenador Stan Van Gundy antes de comenzar la temporada que este año sus Pistons darían mucha guerra y, de momento, no se está equivocando. O sino que se lo digan a los Chicago Bulls que con una de las mejores plantillas del campeonato sucumbieron en el Palace de Auburn Hills obteniendo la primera derrota en su casillero.
La victoria final por 94-88 antes los hombres de Fred Hoiberg sitúa a la franquicia de Michigan con un balance de tres victorias y cero derrotas (el año pasado llevaban más de 20 derrotas cuando alcanzaron las cinco victorias). Este hecho es bastante reseñable ya que es la primera vez desde la temporada 2008/2009 que los Detroit Pistons empiezan tan bien una temporada NBA. En aquel año el equipo de la 'motor city' se clasificó para los playoffs aunque perdió contra los Cleveland Cavaliers en primera ronda por un contundente 4-0. Desde aquella derrota producida tras varios años cayendo en la Final de Conferencia, los Pistons no han vuelto a pisar la post-temporada.
¿Será este el año? ¿Mantendrán los Pistons el nivel comandados por Van Gundy, Drummond y Jackson? Todo está por ver y disfrutar en la mejor liga de baloncesto del mundo.