La NBA tiene previsto celebrar el All-Star Game 2017 en Charlotte (Carolina del Norte), tal y como se anunció el 22 de junio de 2015. Aunque ésto no va a ser posible si no se cambia una ley vigente del estado de Carolina del Norte contraria a la comunidad lésbica, gay, bisexual y transexual (LGBT).
Para poder celebrar el fin de semana de las estrellas en Charlotte, el comisionado Adam Silver ha hablado con varios empresarios y políticos del estado, los cuales creen que el All-Star del 2017 tendrá lugar en su ciudad.
"La sensación era que si desde la NBA podríamos darles un tiempo, la comunidad de Carolina del Norte vería el cambio de la ley con optimismo", explicaba Silver durante la reunión de Editores Asociados a la Prensa Deportiva. "Ellos no nos garantizaban la celebración del evento en la ciudad, y creo que por eso mi respuesta fue que aún faltan 10 meses para la celebración del All-Star, por lo que no necesitaban tomar una decisición ahora mismo. Lo mejor en estos momentos es no fijar un plazo para el cambio de la ley", añadía el comisionado de la NBA.
"Hemos sido, creo, claros al decir que un cambio en la ley es necesario para poder jugar en el tipo de ambiento que creemos apropiado para un evento de celebración como éste", también decía Adam Silver.
Esta ley de Carolina del Norte obliga a las personas transexuales a utilizar baños públicos correspondientes al sexo que aparece en su certificado de nacimiento. Además, la ley excluye a la comunidad lésbica, gay, bisexual y transexual de las protecciones anti-discriminatorias que lleva a cabo el estado, prohibe a los gobiernos locales ampliar las protecciones de la LGTB y bloquea todos los tipos de demandas por discriminación en el lugar de trabajo de los tribunales estatales.
Varios actos de celebración y entretenimiento ya han cancelado los planes que tenían en Carolina del Norte, pero Silver cree que un mensaje de advertencia de que la NBA podría no celebrar el All-Star en Charlotte no enviaría un mensaje adecuado, especialmente porque la liga cuenta con una franquicia en esta ciudad, los Hornets, que son propiedad de Micheal Jordan.
Por delante, meses clave para poder solucionar esta situación y, de esta forma, Charlotte puede albergar su segundo All-Star Game de la historia (el primero fue en 1991).