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Sebastian Vettel, el emperador de la F1

El alemán se corona campeón del mundo por cuarta vez consecutiva tras su victoria en el Gran Premio de la India y se sitúa a la altura de las leyendas más laureadas de la F1. Alain Prost, Juan Manuel Fangio y Michael Schumacher son sus nuevos compañeros en la historia y, a sus 26 años, todavía tiene margen para seguir incrementando su impecable legado. Siete años en la máxima categoría y cuatro títulos mundiales, brillante el alemán.

Sebastian Vettel, el emperador de la F1
Vettel celebra su cuarto título mundial con el público, en la línea de meta. (mirror.co.uk)
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Por Guille Álvarez

“Felicidades Seb, bienvenido al club de los más grandes”, le comunicó por radio Chris Horner en la línea de meta. Sebastian Vettel ya es leyenda del automovilismo mundial. El corredor alemán, coronado tetracampeón mundial en la India tras volver a dominar otro Gran Premio de cabo a rabo, ha ampliado su palmarés con su cuarto título consecutivo. A su altura tan solo están Alain Prost, Juan Manuel Fangio y Michael Schumacher. Vettel, a sus 26 años, está ya junto a los más grandes de la categoría reina del deporte de motor.

Al bajar del coche en la India, las lágrimas regaban el rostro del tetracampeón. Todo elogios y felicitaciones de compañeros, prensa y afición. Una invasión de felicidad como la de su primer título, en Abu Dhabi (2010); o la de su segundo título en Japón, que también llegó a cuatro carreras del final; incluso la felicidad del tercer cetro, conseguido en una confusa e intensa carrera en Brasil. La India fue el territorio de su última conquista, la que le convierte ya en una figura inmortal del deporte mundial. Sus números no dejan espacio para dudar de su calidad: 123 Grandes Premios, 36 victorias, 43 pole positions, 21 vueltas rápidas, 58 podios y 4 títulos mundiales en su carrera. De nuevo, tiene 26 años. Ningún piloto ha sido mejor que él a su edad, de largo.

Vettel ha conquistado su cuarto cetro ganando seis carreras consecutivas (de Bélgica a India) y todavía busca con energía e ilusión ganar los tres combates que restan. De hacerlo conseguiría dos récords más. El de más triunfos consecutivos (está en 7 y lleva 6) y el de total de victorias en un mismo campeonato (13 de Schumacher). La recta final ha sido una exhibición sin quiebros del germano y su equipo. Red Bull ha reaccionado a un inicio lleno de baches y le ha vuelto a dar un coche que ha alcanzado una superioridad insultante al final de temporada. Mérito del equipo y del piloto, un dúo demoledor.

Vettel ha demostrado ser un sobresaliente piloto y ha obtenido la formidable ayuda de la escudería más dominante en las últimas temporadas, la austríaca Red Bull. El binomio ha resultado perfecto y el equipo ha explotado con la llegada de la estrella germana. Él ha El binomio Vettel-Red Bull ha resultado perfecto ofrecido su mejor versión año tras año desde su subcampeonato en 2009 y su conjunto le ha dado las mejores herramientas para consolidar todos sus éxitos. Como cualquier gran campeón, la polémica le ha envuelto en varias ocasiones y han destacado copiosamente sus roces con su compañero de escuadra, Mark Webber.

También la suerte le ha acompañado, esa que se atribuye a los grandes campeones, y ha sido determinante en la consecución de alguno de sus títulos. El mejor ejemplo fue la última carrera de la pasada temporada, dónde se salvó por los pelos en la tercera curva del autódromo de São Paulo y su Red Bull no sufrió daños críticos a pesar de un trompo y un golpe provocados por la tensión y la mala salida con la que empezó el último asalto al título. Al final, superando todas las adversidades, triunfó de nuevo. Cualquiera de los grandes ha pasado a la historia, asimismo, por situaciones similares que después han quedado grabadas en la memoria de los aficionados.

Vettel posee un talento precoz que augura un futuro todavía mejor. Es el ganador más joven y el único en romper la barrera de los 20 años en el momento de su debut. Ganó su primer Gran Premio en un domingo lluvioso en Monza, con 21 años y sin contar con un coche realmente competitivo. Su Toro Rosso superó a todos los rivales en la peligrosa danza de los bólidos bajo la lluvia, una pequeña cata de lo que estaba por llegar. Terminó con 35 puntos y octavo en el campeonato del mundo del 2008, su compañero, otro Sebastien (Bourdais), tan solo consiguió 4 puntos. Estaba claro, el chaval estaba listo para dar el salto a la escudería madre del ambicioso proyecto austriaco.

Solo Fangio y Schumacher han conseguido cuatro coronas consecutivas como él

Con Red Bull, el potencial demostrado explosionó con un subcampeonato en 2009 y su primer título en 2010. Vettel se convirtió también en el vencedor más joven del campeonato de pilotos y ahora mismo solo Fangio y Schumacher han conseguido cuatro coronas consecutivas como él. Va camino de dejar atrás al argentino en ese apartado y acechar los cinco tronos que consiguió su compatriota entre el año 2000 y 2004. Tiene ya 4 títulos y un subcampeonato en tan solo 7 temporadas en la élite. Los límites no se vislumbran en el horizonte para el piloto de Heppeneim a sus 26 años.

La suerte, las facilidades y las polémicas no deben distraer la atención a la hora de valorar la complejidad de sus gestas. Tan solo arrasó con su segundo título, y ha llegado a luchar sus otros dos hasta el último suspiro. Alonso, Hamilton, Räikkönen, Button, Schumacher y muchos más han sido sus rivales, campeones y leyendas que han tenido que sucumbir al poderío de Vettel y Red Bull. Este año ha acabado con otro paseo militar pese a comenzar con más dudas. Los hechos quedarán escritos y madurarán en la historia del automovilismo.

Vettel se ha forjado un hueco entre las leyendas que le inspiraron de pequeño

Más allá de lo intangible, los aficionados pueden entrar a valorar sus cualidades al volante. Se antoja difícil decir algo verdaderamente negativo de un deportista que se ha situado tercero en la clasificación histórica de campeonatos en la Fórmula 1. Sin morderse la lengua, y con la misma perspicacia que cuando obtuvo sus primeros puntos en el circo, Vettel sigue forjando su hueco entre las leyendas que le inspiraron de pequeño.

"Cuando empecé a ver la Fórmula 1 de manera apropiada veía a Jenson, Fernando y a Mark, que ya estaban compitiendo. Entonces ya soñaba pero jamás me atreví a soñar todo esto", declaró el alemán a la BBC. "Tenía fotos de Michael en mi habitación cuando era pequeño... Todavía se me hace extraño verle como a una persona, antes le veía como un dios y ahora hablamos de tu a tu", contestó al ser preguntado por su trayectoria y el reto de alcanzar a Schumacher.

Ha sido la referencia y el rival a batir, nadie ha roto la hegemonía del alemán. 'Baby Schumi', 'Vittelo' o 'Seb' son tres de los motes que le han puesto, pero ahora parece capaz de amenazar al piloto más laureado de la historia si continua con su dominio en los próximos años. Michael Schumacher, el káiser del circo, ha sido la inspiración y el ídolo que le ha ayudado a romper definitivamente todos los moldes. Vettel se ha convertido en un deportista único, de los que se definen por sí mismos.

Fotos: Mirror.co.uk / elpais.com / statsf1.com

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Sobre el autor
Guille Álvarez
Graduado de Ciencias Políticas con inquietudes periodísticas. Juntando letras en la sección de Internacional de La Vanguardia. Amante del deporte (especialmente la NBA), de la música y las series de TV. Blogger en expansión y impulsor de NBAesp.com. Nacido en Barcelona hace 23 años.