El invierno se aleja y la Fórmula 1 ha engordado. El período de hibernación de las escuderías finalizó la pasada semana en el Circuito de Jerez y los kilos de más son una evidencia incontestable. Según la web especializada en motor omnicorse.it, los flamantes monoplazas superarían en un margen de entre 20 y 30 kilogramos el peso mínimo fijado por el reglamento de 2014, que se sitúa en 691 unidades sin tener en cuenta el combustible. Esta diferencia en la masa de los coches podría ser decisiva en los resultados de cada Gran Premio.
Los monoplazas tendrían un sobrepeso de entre 20 y 30 kilogramos
Las causas de este notable desfase estarían determinadas por la nueva reglamentación. Los ingenieros emplean bolas de tungsteno para equilibrar la parte trasera con la zona delantera del monoplaza, con el consiguiente aumento en la masa del coche. Además, los neumáticos Pirelli de 2014 pesan más que los de la pasada campaña, hecho que impulsó el aumento del peso mínimo en un kilogramo el pasado mes de enero. La explicación se halla en que los nuevos compuestos llevan 250 gramos más de kevlar para aguantar mejor el desgaste.
El principal factor se encuentra, por otra parte, en los propulsores V6 Turbo y sus componentes. Por un lado, la inclusión del nuevo sistema híbrido produce un aumento de 35kg en el peso del monoplaza en comparación con el del año pasado. Para complementar este sobrepeso, los motores también superarían el peso esperado, tal y como informa un ingeniero no identificado a la web italiana. En el caso de Ferrari, los componentes mecánicos estarían 12kg por encima de las cifras previstas.
Los métodos de 'adelgazamiento' en la Fórmula 1 actual
Los monoplazas de 2014 superan el peso mínimo y los nuevos componentes y los cambios en el reglamento en el panorama mecánico y aerodinámico contribuyen a este hecho. No obstante, las escuderías tienen dos métodos para reducir la masa de los monoplazas y ganar unas décimas por vuelta. La principal medida sería la racionalización del diseño eléctrico del monoplaza permitiría reducir la masa del vehículo en algunos kilogramos. El reducción de cables en el interior del coche es uno de los recursos que los ingenieros tienen en mente para ganar algunas milésimas por vuelta.
La reducción de peso de los pilotos y el rediseño eléctrico del coche, claves
Por otra parte, el peso del piloto sería otra variante a tener en cuenta entre las escuderías, incluso dentro del mismo equipo. De estas forma, se darían casos como el de Marcus Ericsson, debutante en Caterham, que ha comenzado la temporada a dieta para ganar unas décimas por vuelta a instancias de sus ingenieros. “No me han dicho que tengo que tener un peso en concreto, pero voy a bajar tanto como me sea posible, asegurándome de que todavía puedo correr durante dos horas”, aseguró el sueco. La Fórmula 1 ha comenzado con sobrepeso una de las temporadas más revolucionarias de su historia y los equipos ya comienzan a ponerse a tono para estar a la altura.
| Autoría imágenes | www.caterhamf1.com |