A pesar de que Daniel Ricciardo se encuentra actualmente a 35 puntos de Lewis Hamilton, segundo clasificado en el mundial de pilotos tras su compañero de equipo Nico Rosberg, en Red Bull son conscientes de lo díficil que supone para cualquier equipo alcanzar a las flechas plateadas alemanas. Es por ello, que en Milton Keynes se está trabajando muy duro para asegurarse que los problemas sufridos al principio de la presente temporada, no vuelvan a repetirse en 2015, a fín de poder garantizar a sus pilotos un monoplaza competitivo desde la primera carrera.
De esta forma, Red Bull ha decidido dar un paso más en su relación con su actual motorista (Renault) y en el pasado Gran Premio de Bélgica ambas marcas hacían público un comunicado donde se explicaba que los austríacos asumían el desarrollo de la parte electrónica de la unidad de potencia francesa de cara a 2015.
Con la confirmación oficial del desarrollo de la electrónica y los elementos de recuperación de energía de la unidad de potencia de Renault por parte de Red Bull, parecen diluirse los rumores que apuntaban hacía una posible ruptura entre ambas marcas, debido al intercambio de declaraciones entre los responsables de las mismas en algunos Grandes Premios de la presente temporada, completando así un proceso que ha derivado en una reestructuración en Renault y el retorno de Cyril Abiteboul a su dirección.
Sin embargo, algunos creen en el paddock que este movimiento es solo el primer paso hacia la creación de un propulsor propio por parte de Red Bull de cara al 2016, pues la escudería estaría buscando personal especializado en todas las áreas involucradas en el desarrollo del motor, así como en Silverstone, Andy Palmer, jefe de Infiniti, se habría reunido con los responsables de Red Bull para tratar la posibilidad de fabricar un motor propio, según informa la revista Auto Motor und Sport.
En referencia a estos rumores, Rob White, jefe de operaciones de Renault Sport, quiso negar de forma rotunda a la prensa la posibilidad de que alguno de sus clientes quiera contratar especialistas en propulsores para diseñar uno propio: "Para Renault es más fácil contratar a personal en Inglaterra que en Francia, y el nuevo Red Bull Technology Centre también necesita ingenieros".
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Sebastian Vettel: nuevo chasis en Monza e ingeniero de pista en 2015
Sebastian Vettel no está atravesando en 2014 una de las mejores temporadas en la Fórmula 1 desde que aterrizase en 2008 de la mano de Toro Rosso. A la rápida adaptación de Daniel Ricciardo al RB10 (10-2), se le está uniendo la falta de fiabilidad que el monoplaza del vigente Campeón del Mundo está demostrando. Sólo en Alemania y Malasia, el de Heppenheim ha salido vencedor de un duelo que, a pesar de que el propio Vettel considere injusto compararlo, es de recibo mencionarlo. Además, su sexto lugar provisional en el campeonato de pilotos es la peor posición de un campeón que defiende título desde el año 1997, cuando Damon Hill termino 12º en ese mismo mundial.
Para intentar recuperar la mejor versión del piloto alemán, la revista ‘Auto Motor und Sport’ desvelaba el pasado domingo que el ingeniero de pista de Sebastian Vettel Guillaume Rocquelin, no seguirá en su puesto actual en 2015, así como que Vettel estrenará chasis nuevo en el próximo Gran Premio de Italia.
La reestructuración de algunos cargos del equipo para suplir la menor involucración de Adrian Newey parece haber comenzado, ya que Rocquelin pasará a ser el jefe de carreras en la escudería austriaca en 2015, según confirmada Dr. Helmut Marko a ‘Sky’: "Estas son medidas de reestructuración para mejorar el equipo. Creo que en la pista con Paul Monaghan, ‘Rocky’ y Simon Rennie tenemos tres personas técnicas muy capaces y no veo razón por la que no puedan tomar esas decisiones".
El reemplazo de Rocquelin vendría directo de Force India. Gianpiero Lambiase, actual ingeniero de pista de Sergio Pérez, sería el elegido por la cúpula de Red Bull, en colaboración con Sebastian Vettel, para desempeñar las tareas de ingeniero de pista del tetracampeón del mundo en 2015.
