El primer coche en ser visto en los boxes del circuito de Jerez ha sido Toro Rosso, que en el día anterior al inicio de los entrenamientos de pretemporada ha presentado al mundo el STR10, bólido con el que disputarán su décima temporada.
Al mando del coche estarán los debutantes e hijos de reconocidos pilotos Carlos Sainz Jr y Max Verstappen. A continuación, el análisis técnico del nuevo auto de la escudería de Faenza.
Parte delantera
Al igual que la mayoría de los equipos, Toro Rosso ha tenido que modificar radicalmente su diseño del morro, de acuerdo a las modificaciones aplicadas al reglamento para el presente año. De esta manera, han decidido realizar un morro que no cuenta con el aparatoso apéndice de la temporada pasada, utilizando este año un diseño más amable a la vista, el cual lleva todo el ancho de la trompa hasta casi el final de la misma, donde finaliza en forma puntiaguda.
Desde el cockpit hasta su finalización, el morro (que es apenas más angosto que el de su antecesor) cuenta este año con un ángulo más agresivo hacia abajo, mientras que los flaps delanteros son prácticamente similares a los que contaban a final de la temporada pasada. Igualmente, este último sector contará con diversas modificaciones en los próximos días, teniendo casi un mes de trabajo hasta el Gran Premio de Australia.
Parte media
La zona central del coche presenta unos pontones levemente más pequeños que los utilizados el año anterior, lo que conlleva a unas entradas de aire laterales más diminutas. Delante de ellas se presentan diferentes elementos aerodinámicos que no llegan a ser muy diferentes del STR09.
El recorrido de los pontones hacia la zona trasera no presenta como en el coche de 2014 (y con el que también cuenta este año el MP4-30 de Mclaren) un leve hundimiento, recurriendo quizás a una mejor solución como lo es un diseño más estilizado y sencillo.
La mayor novedad de la parte media la encontramos en la toma de aire superior, la cual se encuentra dividida horizontalmente a la mitad, misma solución que se aprecia en el nuevo Mclaren, buscando refrigerar tanto el motor como las zonas electrónicas.
Detrás de esta novedosa toma de aire, se aprecian dos entradas más de refrigeración, un tanto más pequeñas que las presentadas por el VJM08 de Force India, pero que cumplirían la misma función.
Parte trasera
Con la mayor reserva posible, Toro Rosso no ha querido dar información alguna sobre el difusor trasero, tapado para su presentación. Por su parte, el alerón trasero en principio es similar al utilizado a finales de la temporada pasada, que al igual que el delantero no es en absoluto definitivo.
Una pequeña novedad es la nueva sujeción del monkey-seat, que antes se unía al alerón trasero desde su parte inferior, pero que ahora es sostenida por una barra que comienza en el final del coche y va hasta la parte superior del alerón, por delante suyo.
A diferencia de las grandes aberturas realizadas por Ferrari en su SF15-T, Toro Rosso cuenta con huecos más pequeños a los costados del escape, que igualmente son un tanto más amplias que las de su antecesor. Por último, los elementos aerodinámicos colocados a los costados de los neumáticos traseros no sufrieron variaciones con respecto al pasado año.
Fotos: Getty Images, Auto Motor und Sport