Se acabó la pretemporada para Carlos Sainz. La próxima vez que el piloto español se suba al STR10 será en Melbourne dentro de dos semanas. La última jornada de test de invierno de Sainz ha terminado con buenas sensaciones que permiten pensar en un buen inicio de temporada en Australia.

El piloto español ha completado 132 giros al trazado catalán en una jornada en la que han sido capaces de completar una simulación de carrera sin ningún contratiempo. El único aspecto negativo ha llegado en los últimos compases de la jornada, ya que de nuevo el STR10 ha sufrido un fallo eléctrico que ha forzado a Carlos a dejar el coche parado en el trazado.

Foto: Zimbio

"Esta era la clase de día que necesitábamos y fue muy bien. Esto significa que podemos ir a Melbourne con un impulso en nuestra confianza. Esta tarde fue particularmente productiva, después de que tuviéramos un par de problemas menores por la mañana. La simulación de carrera ha ido bien y en general hicimos una cifra alta de kilometraje, lo que obviamente es lo más importante", comentó un satisfecho Carlos Sainz.

A pesar de completar un gran número de vueltas, el monoplaza de la escudería Toro Rosso ha terminado a 1.169 segundos del mejor tiempo de la jornada, marcado por Lewis Hamilton con el Mercedes, que una vez más ha liderado la jornada de entrenamientos. El español se ha mostrado muy contento con el trabajo del equipo y ha confirmado estar con muchas ganas de que llegue el momento de disputar su primera carrera en la Fórmula 1.

"Me gustaría dar las gracias al equipo por todos sus esfuerzos durante este período de pretemporada, ya que me ayudó a aprender mucho cada vez que he subido al monoplaza. A partir de mañana, quedarán dos semanas para participar en mi primer Gran Premio: estoy deseando que llegue y me siento preparado, sobre todo después de esta prueba. Evidentemente, estoy muy emocionado de que todo esté a punto de comenzar", dijo Sainz tras la jornada de hoy.

Foto: Zimbio

A falta de la última jornada de test que tendrá lugar mañana, en el equipo Toro Rosso hay caras de satisfacción, ya que han podido cumplir los objetivos planeados para la sesión de hoy en términos de adaptación y puesta a punto del nuevo STR10.

"Ha sido otro buen día de trabajo durante el cual realizamos varias pruebas. Por la mañana, simplemente obtuvimos una pequeña cantidad de datos con nuestro tiempo en pista, antes de cambiar nuestro enfoque a las necesidades del piloto. Creo que fue bueno para Carlos que él fuera capaz de concentrarse en conseguir el coche que le conviene en términos de puesta a punto y las sensaciones con el monoplaza. La primera cuestión de la tarde fue una simulación de carrera y después de que ese objetivo se completase con éxito, aún tuvimos tiempo para hacer algunas tandas cortas que buscan explorar el rendimiento puro de ciertos elementos. Por desgracia, casi al final del día, un problema eléctrico menor dejó a Carlos tirado en la pista", ha comentado Phil Charles, ingeniero jefe de carrera de la escudería.

Foto: Zimbio