La pretemporada de Fórmula 1 2016 ha finalizado y es hora de que cada piloto y cada equipo hagan balance de los datos que han recabado durante estas dos semanas para hacerse una idea de dónde se situarán tanto en Australia como, al menos, en las primeras citas del mundial. En el caso de Daniel Ricciardo y de Red Bull, los datos parecen ser mejor de lo que esperaban en un principio, gracias en parte al motor Tag Heuer, la marca blanca de Renault.
El oceánico, que ha finalizado la última jornada de test en sexta posición, a 1”575’ de Sebastian Vettel, se muestra “encantado” al saber que la próxima vez que se suba al RB12 será para una carrera, y en casa, en el circuito de Albert Park, en Melbourne. Su balance es “muy bueno”: “Creo que en tres de mis cuatro días he estado por encima de las 100 vueltas, así que es muy bueno”. No obstante, apunta a que sería ideal tener “más días de pruebas”.
Daniel confirma que el RB12 ya ha recibido algunas evoluciones: “Hemos realizado algunas mejoras y queda más por venir”. Sobre la línea que está siguiendo el equipo austriaco, el aussie asegura que “es buena” y que “es un buen punto para empezar el año; estamos en una mejor posición que en las dos temporadas anteriores”.
No obstante, no se hace ilusiones y admite su inferioridad respecto a los favoritos: “Mercedes y Ferrari están por delante, son más rápidos […]. Si mañana corriésemos en Mónaco, quizás tendríamos una oportunidad de subir al podio, pero necesitamos ir más allá”.
La próxima vez que Daniel Ricciardo se suba al coche será en Albert Park, donde ya consiguió un podio en 2014, aunque le fue arrebatado por incumplir la normativa del límite de flujo de combustible. Sin duda, querrá repetir éxito, aunque seguro que es consciente de la dificultad.
