Los campeones deben demostar que son campeones y en la carrera de Bahrein Rosberg ha demostrado ser uno de ellos. "Es blandito", "le falta agresividad", "no aguanta la presión", "su compañero se lo ha comido"... Estas son palabras que se han usado para describir al piloto alemán, pero con su segunda victoria del año, ha callado momentáneamente todas las críticas.
Lewis Hamilton tuvo serios problemas en la salida y con el coche tocado, se tuvo que conformar con el tercer puesto. Kimi Räikkönen tuvo un día de nueve y situó al Ferrari por delante de un Mercedes. En cambio, Sebatian Vettel, se marchó rápido del desierto y es que su Ferrari rompió motor en la vuelta de calentamiento.
Rosberg le come la tostada a Hamilton
Acostumbrado a quedar por detrás de él y con todas las críticas apuntando hacia su persona, Rosberg se ha resarcido y se ha alzado con la victoria. Rosberg ha vencido y ha convencido a todos. Tan sólo se han disputado dos carreras de esta campaña, pero el '9' ha mandado un claro mensaje a su compañero y le ha recordado que este año no lo va a tener tan fácil.
Es muy importante vencer, pero también convencer y en el Circuito Internacional de Bahrein el alemán lo ha hecho. Impresionante salida conteniendo a sus rivales, ritmo espectácular y estrategia impecable. El 'rubito' que cometía errores ha dejado de hacerlo y ya asusta a sus rivales.
Unos metros más a la derecha se encuentra Lewis Hamilton. El británico ha tenido un día complejo y desde la salida comenzaron los problemas. Su arrancada fue mala y Valtteri Bottas terminó de arruinarla llevándose al '44' por delante y dejando tocado el Mercedes. Dirección de Carrera tomó cartas en el asunto y decidió ponerle un drive trought al de Williams. Con el Mercedes AMG tocado intentó ir a la caza del Ferrari de Räikkönen, pero se tuvo que conformar con la tercera posición y con ver como se le escapa ligeramente su compañero.
Ferrari sigue lejos de Mercedes
Bahrein, un circuito teóricamente Ferrari y una fecha señalada en el calendario de Maurizio Arrivabene, pero ni con esas. El Ferrari de Sebatian Vettel se rompía en la vuelta de calentamiento y dejaba patente que la fiabilidad de los coches rojos deja mucho que desear.
Kimi Räikkönen invita a soñar. En la fábrica italiana no todo son malas noticias y es que el finlandés ha colocado al Ferrari por delante de un Mercedes y ha subido al podio en segunda posición. Sin lugar a duda es preocupante ver como la bala plateada de Hamilton recortaba décimas con el Fórmula 1 bastante tocado. Dos carreras y dos motores rotos, uno de Kimi y otro de Vettel, un dato que hace saltar las alarmas en las gazzettas italianas. Además tuvieron que realizar una estrategias muy conservadora para aguantar las acometidas del Campeón del Mundo.
Domingo negro para Carlos Sainz
No ha sido un buen fin de semana para los pilotos españoles. Después de la confimación de que Fernando Alonso no podía correr, la nefasta clasificación de Carlos, su abandono en carrera y el sexto puesto de Verstappen, tan sólo queda pensar en el próximo Gran Premio.
En las primeras curvas Sergio Pérez colisionó con Carlos y le produjo un pinchazo en su neumático trasero. Para más desgracia su Toro Rosso quedó tocado y rápidamente se puso en última posición. Con todo decido era el momento de replegar velas y volver al garaje para cuidar el motor. Después de la noche de Bahrein saldrá el sol y seguramente el madrileño tenga días más favorables.
Tras la oscuridad de la noche de Bahrein y los fuegos artificiales después de la llegada de Nico Rosberg, la caravana del Mundial se traslada a China. Es el momento de confirmar sensaciones y de ver si Nico Rosberg sigue dominando con puño de hierro el Campeonato del Mundo de Fórmula 1 2016. El desierto volverá a la calma y a la tranquilidad, el Gran Premio de Bahrein 2016 es historia.