Esta temporada ha traído consigo el reasfalto de algunos circuitos como Red Bull Ring, Hungaroring y el Circuito Internacional de Sepang. Pirelli ha estado en cada uno de ellos para recoger información como la adherencia y la agresividad del asfalto, así como la degradación y desgaste al que estarán sometidos los neumáticos. El “nuevo” Hungaroring se inauguró en el mes de abril y lo cierto es que las mejoras no fueron motivadas por la F1, sino que se realizaron con la intención de acoger a Moto GP en un futuro.
Sin embargo, el nuevo asfalto podría ser fundamental, al igual que lo fue en el Gran Premio de Austria. El responsable de Pirelli en la Fórmula Uno, Paul Hembery, cree que la reducción de baches y el aumento de la adherencia por el nuevo asfalto, la incorporación de algunos pianos y escapatorias, junto al mayor potencial de los coches harán que el crono se reduzca significativamente. Incluso espera que se supere el récord del circuito, que actualmente se encuentra en 1:18.436, alcanzado por Barrichello en 2004. Además ha añadido: "Los entrenamientos libres serán muy importantes para conocer el rendimiento de las ruedas en el trazado".
La combinación elegida para rodar sobre el nuevo asfalto de Hungría es la más habitual de la temporada: blanco, amarillo y rojo, o lo que es lo mismo: medios, blandos y superblandos. Los medios son ideales para las altas temperaturas de Hungaroring y las velocidades que se esperan alcanzar, los blandos serán el compuesto más estable de la combinación y los superblandos. La estrategia y combinación que hagan con los superblandos será decisiva ya que las temperaturas del trazado húngaro no son las que más convienen a las gomas rojas, que podrían verse afectadas por el temido blistering y que de por sí sufren un gran desgaste. Además, el nuevo asfalto, más oscuro y por lo tanto más caliente, intensificará la degradación de cualquier neumático. Por lo tanto, se espera que para la carrera la mayoría de equipos opten por los dos primeros y por el superblando para la clasificación. "Hungría ofrece un tipo de desafío muy diferente a lo que hemos visto en Silverstone, pero algunos de los equipos utilizaron los test de Silverstone para probar ideas que podrían ser relevantes para el circuito de Hungaroring, por lo que será interesante ver qué efecto tiene esto”, ha comentado Hembery.
Hay que destacar que esta misma combinación de neumáticos es la que se utilizará para el Gran Premio de Alemania, el último antes de parón veraniego. Las condiciones del Circuito de Hockenheim serán diferentes, por lo que la mayoría de escuderías se han decantado por el superblando, que junto al blando serán los compuestos protagonistas sobre el asfalto alemán, que no estuvo en el calendario en la temporada pasada.
