El benjamín de la clase aprende a pasos agigantados. Max Verstappen ha sabido ganarse a muchos adeptos con una rápida adaptación al nuevo monoplaza, cosa que ha servido para que este evolucionara rápidamente. Estos hechos se ha podido comprobar en las últimas citas, donde los de Milton Keynes han estado batallando por las posiciones de podio.
El piloto del equipo Red Bull Racing ha señalado que le gustó como se adaptó el monoplaza a las complicadas condiciones de Silverstone, donde la lluvia y el rápido drenaje del asfalto hizo que el pilotaje del piloto fuera realmente importante para mantener el coche sobre la pista, cosa que logró Verstappen consiguiendo mantener un ritmo que le permitió subirse al podio: “Sí, a mi me gustó mucho, tanto compitiendo con los Intermedios y el compuesto medio. Creo que el coche estaba funcionando muy bien en ambas condiciones, pero sí, sabemos que el coche es siempre muy fuerte en mojado y yo estoy disfrutando en mojado también. Fuimos muy fuerte. Incluso cuando estábamos en los neumáticos medios podríamos aferrarnos bastante bien al ritmo de carrera. Así que estaba muy contento con eso. Creo que al final, pese a terminar tercero, llegar a estar segundo fue un gran resultado para el equipo”.
El holandés reconoce que los trazados lentos y revirados como el de Montecarlo beneficia a su monoplaza, por lo que debe de ir bien este fin de semana. Pero ha resaltado que en el resto de circuitos van también bien, por lo que es positivo, ya que pueden rendir al más alto nivel: “Bueno, creo que la mejor oportunidad fue en Mónaco para ir a lo seguro - pero creo que aquí también el coche puede ser muy fuerte y definitivamente estoy deseando que llegue el fin de semana, ya que hasta ahora el coche ha sido muy fuerte, incluso en pistas donde no esperábamos que fuera tan fuerte. Sólo tenemos que esperar y ver. Tenemos una buena configuración inicial, pero falta ver como podemos mejorar durante las sesiones. Con suerte podemos estar bastante cerca de los Mercedes”.
Por último el compañero de equipo de Daniel Ricciardo ha destacado que no se llega a un punto de sabiduría máxima en un monoplaza, puesto que en cada instante se aprende algo más. Este hecho hace que la confianza con el coche sea cada vez alta, al encontrar puntos de mejora: “Pienso que siempre se aprende. Por supuesto que me siento muy seguro con el coche, pero cada fin de semana que me siento en el coche, enseguida se está aprendiendo de nuevo y encontrando nuevos puntos para mejorar la puesta a punto, por lo que todavía se está aprendiendo”.