La Fórmula 1 se ha ido de vacaciones, pero para Pirelli no hay descanso. El suministrador oficial de neumático del campeonato ya ha empezado a trabajar en las gomas nuevas para le temporada que viene, que sufrirán un cambio importante. Como ya se anunció, los coches de Fórmula 1 sufrirán una modificación en 2017, haciéndolos más anchos y con aspecto más agresivo. Si los coches cambian, los neumáticos también y, al igual que el monoplaza, estos serán mucho más anchos, recordando a los neumáticos usados en épocas pasadas.
Pirelli aceptó modificar sus gomas a cambio de más jornadas de test para probarlas. La FIA aceptó la petición, y ayer empezaron estas pruebas en el circuito italiano de Fiorano, propiedad de Ferrari. El circuito fue construido en 1972 y cuenta con un poco más de 3.000 metros de largo, llegándose a alcanzar los 300 Km/h y con una media de velocidad de 160 Km/h. Sebastian Vettel fue el encargado de probar por primera vez los neumáticos. El alemán rodó por el trazado italiano con el SF15-T, adaptado para las nuevas gomas, y completó 120 vueltas. El programa de Pirelli para ayer se centraba principalmente en probar los neumáticos intermedios y de lluvia extrema, aunque el campeón del mundo también dio algunas vueltas de instalación con los nuevos slicks. Para probar los neumáticos, se mojó con aspersores la pista italiana.
Los compuestos de la próxima temporada serán un 25% más anchos que los actuales, pasando de medir 245/660-13 actualmente los delanteros a 305/670-13. Los traseros son los que experimentan un cambio más radical pasando de 325/660-13 a 405/670-13. Los intermedios tendrán un diámetro de 675 mm y los de lluvia, de 680 mm y permitirán evacuar más agua que los actuales. Estas modificaciones harán que los monoplazas tengan más grip mecánico que, junto a la nueva aerodinámica, permitirán que los tiempos bajen entre cuatro y cinco segundos por vuelta, previsiblemente.
Las pruebas de Pirelli no han hecho más que empezar. Esteban Gutiérrez ha tomado hoy el relevo de Sebastian Vettel en Fiorano. Los nueve test restantes los realizarán entre Mercedes, Red Bull y Ferrari, las únicas escuderías que han accedido a modificar algunos de sus coches anteriores para estas pruebas. El 3 y 4 de agosto serán los de Red Bull quien prueben los nuevos neumáticos de seco en el trazado italiano de Mugello. A partir de septiembre, Mercedes tomará el relevo, rodando en los circuitos de Barcelona-Catalunya y Paul Ricard. Los test finalizarán en noviembre en el circuito de Abu Dabi, donde rodarán las tres escuderías a la vez.