Un Wolfsburgo repleto de confianza recibía al colista de la Bundesliga, el Hannover con la obligación de no ganar ante su público y sumar una victoria que le permitiera continuar en las primeras posiciones de la clasificación.Sin embargo el encuentro se les complicó en la segunda parte y lo que parecía ser un plácido partido con el gol de Dost, pudo rozar la pesadilla si los visitantes hubieran estado más acertados en los últimos metros. Los de Hecking mandaron en el partido ante un rival que no hizo gran cosa pero se encontró con un buen gol que les dio un valioso punto.
Con Luiz Gustavo todavía recuperándose de sus molestias, los locales apostaron por un 4-1-4-1 con Dost como punta a diferencia que la semana pasada donde el técnico apostó por Bendtner. El primer aviso lo daría el Hannover por medio de Sorg, ex del Friburgo que probaba sin suerte sobre la portería de Benaglio. A partir de ahí, cuatro córners y doce ocasiones de los locales por solo cuatro de los visitantes. Dost no solo anotó el gol sino que además estuvo muy participativo arrastrando a la defensa y moviéndose por todo el frente de ataque. Suyo fue el primer remate de cabeza que se iría por encima del larguero.
Zieler con una doble actuación salvó al Hannover al detener los lanzamientos de Kruse y de Dost. Consciente del estado de forma de sus mejores jugadores y liderados por un buen Draxler, los locales, por medio de Kruse otra vez, pudieron adelantarse pero de nuevo el cancerbero visitante se mantuvo imperial bajo los palos para mantener el empate.
El Wolfsburgo seguía acechando, aprovechando muy bien las bandas y gracias a ello llegó el primer gol cuando Caligiuri ponía un centro medido para que Dost siguiera de dulce con el gol. El resultado se antojaba corto para las ocasiones que había tenido el equipo pero suficiente para ir a sentenciar el encuentro en la segunda parte.
El Hannover da la sorpresa
La segunda parte comenzó con un Hannover más valiente que tras el descanso decidió adelantar algo más las líneas para sacar algo positivo de un estadio siempre difícil. Sané ya avisaba de lo que vendría dos minutos después mientras que Draxler buscaba la portería constantemente sin estar acertado.
El partido parecía dominado totalmente por el Wolfsburgo hasta que Kiyotake recibió un centro medido dentro del área pequeña y fusiló a Benaglio ante el silencio del Volkswagen Arena. Y fueron precisamente los visitantes los que siguieron dominando el cuero y los que de no ser por el desacierto en los metros finales, podrían haber anotado algún gol más en los minutos posteriores al empate. Pero no aprovecharon el desconcierto de los locales y fueron estos los que volvieron a por los tres puntos. Primero con un chut con la derecha de Ricardo Rodríguez y acto seguido con una ocasión muy clara para Caligiuri que detenía Zieler salvando otra vez a su equipo.
La entrada de Bendtner por un irreconocible Schürrle buscaba que los locales tuvieran un juego más directo con solo 15 minutos por disputarse. Un pase del delantero danés dejaba solo a Arnold qu e sacaba un disparo seco que se encontraba con Zieler otra vez.
El partido se encaminaba hacia el final con el Wolfsburgo fallando en su casa en un encuentro que no podía escaparse. Arnold tuvo la más clara de la segunda parte cuando recibía el cuero con todo a su favor dentro del área, se llenaba de balón y el cuero se iba lamiendo el poste de un Ziele que ya había hecho la estatua. El Hannover tuvo una última falta lateral que despejó sin problemas la defensa del Wolfsburgo y los visitantes fueron capaces de rescatar un valioso empate.