Cobro de córner y rechazo defensivo. La acción pareció ralentizada por algún control universal dentro de Allianz Arena. Xabi Alonso, mediocentro del Bayern de Múnich, acomodaba con su pierna izquierda y, en el mismo movimiento y el balón picando, pescaba el esférico con una volea fenomenal de pierna derecha que terminaba clavada en la esquina superior derecha de Mathenia y firmaba el que quizás sea, hasta ahora, el mejor gol de la DFB Pokal 2015-2016. Esa acción fue la gran diferencia entre el Bayern de Múnich y un Darmstadt 98 bastante aplicado en defensa y que tuvo un par de acciones en ataque, aunque sin mayor trascedencia para Manuel Neuer bajo palos. Con ese 1-0 el Bayern avanza a Cuartos de Final de la Pokal, donde esperará al próximo sorteo para conocer a su rival. Por su parte, el Darmstadt cierra su temporada copera con una buena imagen y dejando en claro que ha aparecido en escena para ser protagonista y complicar a cada monstruo que se le cruce en Alemania.
La muralla azul desplega en Allianz Arena
El partido arrancaba con el once titular repetido del Bayern en este período de múltiples lesiones por el que atraviesa Guardiola. Por su parte, el Darmstadt cerraba filas dejando únicamente a Wagner como hombre de ataque y sin mayor acompañamiento de sus extremos o volantes. Bajo estas acciones, Kimmich colocaba el primer envío al área rival al 1', pero Sulu se levantaba por los aires de Múnich para despejar el esférico. Por su parte, Coman abría la defensa con una exquisita pared con Vidal, pero su centro al área no era cerrado por Lahm a puerta vacía y el gol no llegaba todavía al pizarrón. Finalmente, Vidal lo intentaba al 5' con un remate cruzado, pero Mathenia respondía de buena forma bajo los tres palos.
El Darmstadt cerraba filas dejando únicamente a Wagner como hombre de ataque y sin mayor acompañamiento de sus extremos o volantes
Una de las acciones más claras del primer tiempo llegaría al 6', cuando Xabi Alonso, inspirado y sumamente quirúrgico, enviaba un trazo largo desde medio campo a la espalda de la defensa, donde Coman intentaba definir de primera intensión dentro del área y ante la salida de Mathenia, pero su disparo era mal conectado y se iba totalmente desviado por lìnea final. Tras esta jugada, el Darmstadt terminó por acomoddarse en su zona y obligó al Bayern a originar un toque intrascendente del balón, cambiando de lado cada una de sus acciones, pero sin poder taladrar la muralla azul que se había plantado con solidez ante Mathenia en el área visitante.
Con el cierre de filas de su rival, el Bayern comenzó a optar por el envío largo de balones y fue ahí cómo encontró cierto grado de peligrosidad, aunque sin la voracidad y precisión acostumbradas. Lahm lo intentaba con un centro al 10', pero fue Lewandowski quien, al 11', trepaba adentro del área por derecha y sacaba un envío a segundo palo donde Vidal era anticipado por Heller. Lahm conectaba con Lewandowski al 12', pero el remate del polaco se iba rasante y apenas roazando la base del poste izquierdo, a pesar de la estirada de Mathenia. El gol seguía siendo una sensación en cada acción, pero nada más que eso, una sensación.
Los balones seguían llegando al área del Darmstadt y, al 16', Kimmich trepaba en velocidad, construía una pared con Lahm por derecha y enviaba un centro rasante que Garlics despejaba, pero su rechazo estuvo a punto de convertirse en autogol. Lewandowski volvería a acomodarse dentro del área al 18' para sacar un derechazo rasante que saluda al poste izquierdo del rival y se iba por línea final por muy poco. La única respuesta tibia del Darmstadt fue al 22', cuando Heller corrió a la espalda de Kimmich y conectó un centro al área que Wagner apenas cabeceó a manos de Neuer. El Bayern apretaba y el Darmstadt renunciaba al ataque, pero los bávaros extrañaban mucho la velocidad de Costa y Robben, ante un solitario Coman que no podía en soledad con el encargo.
El gol seguía siendo una sensación en cada acción, pero nada más que eso, una sensación
Xabi Alonso daría su primer aviso al 34', al tomar un cobro de tiro libre y colocarlo a manos de Mathenia quien, a dos tiempos, por fin conseguia hacerse con el balón. Müller era el encargado al 38' de probar la resistencia del Darmstadt, pero su disparo iba suave a manos del guardameta visitante. Pero, al 42', tras una gran acción de Coman y Rafinha por izquierda, llegaba un cobro de esquina para el Bayern de Múnich efectuado por Vidal. El balón era rechazado por Sulu y, en tres cuartos de cancha, Xabi Alonso acomodaba el despeje de zurda y, con el balón en el aire, sacaba un disparo sublime, como si de un arrebato de divinidad se tratara, el cual se clavaba en el ángulo superior derecho de la puerta Mathenia. Golazo del tolosarra y una muestra de su categoría en cuanto a pegada del balón. El mazazo del Bayern llegaba en el libreto menos característico de su sinfonía, pero con Xabi Alonso como solista perfecto.
Con esa acción, más otro cabezazo de Lewandowski al poste al 44', tras un gran centro de Kimmich, el Bayern se iba al descanso con la ventaja en el marcador, en un premio medianamente justo a su propuesta siempre ofensiva, aunque claramente menos efectiva que en partidos anteriores. Por su parte, la desventaja mínima respondía a un premio, también medianamente justo, para un equipo bien aplicado en defensa, pero demasiado tibio en ataque como estaba siendo el Darmstadt, quien, hasta ese momento, apenas había podido gestar algún intento leve de contragolpe hacia Manuel Neuer.
La estrategia de la ventaja
Para la segunda parte, el Darmstadt, entendiéndose abajo en el marcador, salió a apretar un poco en ataque e intentó crear una que otra sorpresa sobre el arco de Neuer, consiguiendo poner cierta duda en el once bávaro. Sin embargo, con la posesión como axioma fundamental, el Bayern ejerció de su mejor pragmatismo y supo administrar su ventaja sin sufrir mayores problemas ante su rival. Para ello, al 46', Müller abría el costado con un desborde en velocidad a pase de Lahm, pero su centro era bien cortado por Sulu antes del cierre de Lewandowski sobre punto penal.
El Bayern ejerció de su mejor pragmatismo y supo administrar su ventaja sin sufrir mayores problemas ante su rival
El Darmstadt respondía al 50' con un desborde de Heller y el centro al área que Wagner no alcanzaba a rematar y dejaba que Boateng despejara con total seguridad. Luego, al 52', Joshua Kimmich hacía las veces de 'Quaterback' y enviaba un trazo largo al área donde Thomas Müller ejectuba una volea perfecta, pero que se iba apenas por encima de la puerta de Mathenia, quien ya se estiraba para la postal del partido. Al 54', otra vez Müller llegaba al área desde atrás para conectar un zurdazo que alcanzaba a ser rebotado por Rajkovic y atajado, finalmente por Mathenia. Sin embargo, al 58', Heller volvía a escaparse por izquierda y a colocar otro centro peligroso que Javi Martínez lograba controlar. El Darmstadt daba avisos de poder ser peligroso, aunque el Bayern mantenía siempre le control.
Con Heller más peligroso, el retoque de Guardiola llegó y Kimmich pasó a ejercer más labores de interior izquierdo, dejando que Rafinha cambiara a la derecha, para que Lahm corriera como extremo por ese costado siendo acuerpado por el brasileño. Tras este movimiento, el Bayern volvió a arrinconar al Darmstadt contra su zona, generando peligro por intermedio de Lahm, quien, al 58', se comía a Garlics por derecha y enviaba un centro que Niemeyer despejaba, pero que casi hundía en su propia portería. Dos minutos después, al 60', Sulu rechazaba mal un centro de Lahm y Lewandowski lo pescaba en el área, pero Rajkovic incomodaba al polaco y su cabezazo llegaba mansamente a manos de Mathenia.
El retoque de Guardiola llegó y Kimmich pasó a ejercer más labores de interior izquierdo, dejando que Rafinha cambiara a la derecha, para que Lahm corriera como extremo por ese costado
Las acciones bávaras se incrementarían al 65', cuando Lahm, siendo una auténtica flecha por derecha, se internaba nuevamente a espalda de los defensas, enviaba un centro que despejaba Sulu y, en el rebote, recentraba para que Rajkovic anticipara a Lewandowski, quien llegaba solo para empujar el balón ante el vuelo fatídico de Mathenia. Kimmich lo intentaba al 66' de larga distancia y su disparo se iba apenas por encima de la puerta rival, mientras Thiago hacía su ingreso para buscar fluidez y mejor control del esférico en el Bayern. La respuesta rival llegó al 71', con la mejor acción ofensiva del Darmstadt en todo el partido por intermedio de Heller, pero el cabezazo en solitario de Wagner picaba y facilitaba la captura y control de Neuer en el fondo.
Las sorpresas tácticas siguen llegando cuando de Guardiola se habla y, al 74', en un auténtico cambio de roles, Müller corría como un lateral por la derecha, desbordaba y colocaba un centro a punto penal donde, milagrosamente, aparecía Philipp Lahm para elevarse y cabecear a puerta, pero su remate se abría por poco y asustaba a Mathenia en el fondo. El mundo visto desde la óptica de Guardiola. La paradoja misma de la realidad hecha fútbol. Tras esta jugada, era Rafinha quien, al 78', sacaba un derechazo rasante entrando por el centro del área, pero que Mathenia controlaba firmemente a dos tiempos. Luego, al 79', Müller recibía un pase de oro de Lahm sobre la derecha, pero Junior Díaz frenaba la trepada del alemán con aparente penal que no se sancionó.
El mundo visto desde la óptica de Guardiola. La paradoja misma de la realidad hecha fútbol
La última jugada de verdadero peligro en el partido llegaría al 82', cuando, un gran desborde de Lahm por derecha acabaría en centro al área donde, tras el mal despeje de Rajkovic, Coman pescaría el esférico y conectaría una gran chilena que Mathenia rechazaba a córner con un manotazo limpio y firme. Tras esta jugada, el partido bajó sus revoluciones con ambos equipos asimilando el resultado y la ronda de cambios que enfrío el crónómetro en Allianz Arena. Con este resultado, el Bayern de Múnich accede a la ronda de Cuartos de Final de la DFB Pokal, donde esperará al próximo sorteo para saber a quién enfrentará en dicha estancia. Por su parte, el Darmstadt sigue mostrando su valentía y buena disposición táctica, en una temporada dorada para un equipo acostumbrado al bajo perfil de las categorías inferiores en Alemania.