Partido emocionante el que tuvo lugar en el BayArena de Leverkusen. Pese a que el peso del encuentro lo llevó el equipo local, los de Roger Schmidt se vieron sorprendidos por la valentía de los visitantes y por la inferioridad numérica que supuso la expulsión de Wendell en la primera mitad. Chicharito adelantó a las aspirinas pero Pizarro, Santiago Garcia y Grillitsch consiguieron los goles para el Werder Bremen que ve en la DFB Pokal la oportunidad de resarcirse tras su mala temporada en la Bundesliga.
Intensidad, goles y expulsión
La magia de la DFB Pokal puede resumirse en los primeros cuarenta y cinco minutos entre el Bayer Leverkusen y el Werder Bremen. Una primera mitad vibrante que acabó teniendo de todo. El conjunto local sería el primero en tener la posesión, intentando dormir el partido y buscando el error de la defensa rival. Por su parte, el Werder Bremen se replegaba atrás y buscaría hacer daño a su rival a base de contraataques. Se llegaba al minuto 20 de partido y el granadino Alex Gálvez derribó a Kiessling dentro del área. El árbitro no lo dudó y pitó la pena máxima. El mexicano Chicharito anotó el penalti poniendo por delante a su equipo.
El Bayer Leverkusen se quedó con diez justo antes del descanso y vio como el Werder Bremen le remontaba un partido que tenía controladoSin embargo, diez minutos después, Santiago García remataría una falta dentro del área tras prolongar con la testa Fritz. Tardó poco la reacción del Werder Bremen, que por momentos estaba mostrando una cara totalmente opuesta a la que suele dar en la competición doméstica. Antes del descanso llegó la jugada polémica y que a la postre, fue determinante en el devenir del encuentro. Wendell derribó a Pizarro cuando éste se plantaba delante de Leno. El colegiado se llevó la mano al bolsillo y decidió expulsar al lateral izquierdo del Bayer dejando a estos con diez jugadores. Pizarro no fallaría la pena máxima y se llegaría al descanso con la remontada de los visitantes después de que el conjunto local hubiera dominado prácticamente todo el primer tiempo.
Bellarabi tiró del carro pero fue insuficiente
El segundo acto comenzó con cierta valentía por parte del equipo de Roger Schmidt, que decidió poner una defensa de tres hombres. El Werder Bremen estuvo a punto de sentenciar el partido aprovechándose de tener un jugador más sobre el verde pero Leno y Ramalho evitaron que el disparo de Bartels entrara en la portería. Chicharito tuvo que retirarse por lesión, asi que el entrenador local volvió a colocar una defensa de cuatro jugadores introduciendo en el terreno de juego a Papadopoulos.
A pesar de jugar con un jugador menos, el Leverkusen metería al Werder Bremen en su área gracias, en parte, a Bellarabi, que tiró del equipoCon la entrada del griego, el Leverkusen se encontró más cómodo y comenzaría a tener la pelota. Çalhanoglu, Kampl y Bellarabi decidieron echarse el equipo a la espalda, sobre todo este último, que fue el mejor de su equipo durante la segunda mitad. El alemán, lo intentaba desde la banda derecha pero sus centros y tiros no llegaron a buen puerto. Las 'aspirinas' lo intentaron a la desesperada y acabaron pagándolo porque el Werder Bremen sentenció justo cuando entrábamos en la recta final del partido. En una contra de manual, sería Grillitsch quien remataría la jugada, aunque eso sí, en claro fuera de juego, que a pesar de que tanto asistente como árbitro principal dudaron, acabaron concediendo el tanto.
Finalmente, el Werder Bremen contra todo pronóstico ganó este encuentro de cuartos de final de la DFB Pokal por 1-3 dejando en evidencia a los de Roger Schmidt que a pesar de que fueron mejores caen eliminados en la ronda copera. Los visitantes ven en este prestigioso torneo la oportunidad de demostrar todo lo que no han demostrado aun en la Bundesliga.