El Borussia Mönchengladbach logró una amplia victoria frente a un rival que en ninguna fase del encuentro le pudo plantar cara. La primera mitad estuvo muy atascada en cuanto a juego hasta el gol de Stindl, gracias a un buen sistema defensivo de los visitantes que apenas dejaban crear ocasiones. Pero en la segunda mitad, los fallos defensivos, sobre todo del portero, hicieron que su equipo cayera goleado frente a un rival que apenas tuvo que esforzarse.
Stindl no entiende de partidos dormidos
En los primeros compases del partido, se vio a ambos equipos muy ambiciosos, tratando de buscar de manera incisiva la portería rival. Pero con el paso de los minutos fueron los ‘Potros’ los que fueron haciéndose protagonistas del encuentro, teniendo ellos la posesión del balón. En estos primeros minutos se vio una de las acciones más peligrosas, que llegaría con un libre directo que el meta visitante atrapó con facilidad.
A partir de ese momento los locales se hicieron claros dominadores del encuentro, tratando de llevar peligro a la portería rival, primero con mucha circulación de balón y tratando de aprovechar los espacios en la defensa. Y posteriormente con veloces transiciones ofensivas que pudieran aprovechar al fragilidad defensiva de su rival. Pero el conjunto visitante, necesitado de puntos, realizaba una variante en el sistema en labores defensivas, colocando dos líneas de cuatro muy cerca de área, que dificultaban las llegadas de su rival.
El Eintracht tuvo entonces claro que si quería tener alguna oportunidad de anotar un tanto, sería con contraataques, que sorprendieran a una adelantada defensa del Gladbach. Pero esto ocurrió en muy pocas ocasiones.
En una acción aislada, con la primera media hora superada, el equipo local logró adelantarse en el marcador. Un saque de falta lateral fue despejado de forma errónea por el portero visitante, dejando el balón a Stindl en el punto de penalti. Este aprovechó que no tenía oposición rival y logró dispara a partea, superando a la defensa rival, y anotando el primer gol.
Este gol no hizo más que dormir un encuentro en el que los locales se estaban encontrando muy cómodos, ante la pasividad ofensiva de su rival
Muchos fallos defensivos
La segunda imitad comenzó sin apenas cambios, con un equipo local muy superior a su rival, que seguía sin encontrar la manera de llevar peligro sobre la portería de Sommer. El equipo local continuó con su juego sencillo y veloz, en donde el portero rival se estaba convirtiendo en su mejor jugador. Cuando apenas pasaban siete minutos de la segunda mitad otro error en un despeje de Hrádecký, dejó el balón a los pies de Raffael, que ante la mala salida y peor despeje del guardameta, anotó a portería vacía.
Con este resultado, al conjunto del Eintracht no le quedó otra que adelantar líneas con la finalidad de encontrar un gol que les acercara en el marcador, y les diera la oportunidad de llevarse un resultado positivo del Borussia-Park. Pero este juego, en lugar de beneficiarles, les perjudicó, ya que estuvieron permitiendo muchos espacios defensivos, que estuvieron aprovechando constantemente los atacantes locales.
Pero pese a tener durante muchos minutos el control del balón, a las ‘águilas’ se le estaba haciendo muy complicado el lograr profundizar sobre el área contrario. A 13 minutos del final, tuvieron su ocasión más clara en una acción de Seferovic, pero el disparo se estrelló en el palo. Pero los locales contestaron a esta acción con una gran jugada de Dahoud, en la que el centrocampista de origen sirio anotó el tercer gol para su equipo.
A partir de ese momento, el partido se rompió del lado de los locales, que pese a no tener el balón, continuaron teniendo las ocasiones más peligrosas, ante un rival que definitivamente bajó los brazos. Ante este panorama, el colegiado señaló el final de los 90 minutos, que mantiene al Borussia en la lucha por los puestos de UEFA Champions League y hunde al Eintracht en la pelea por el descenso.