La fortuna de los mejores o la desgracia de los más débiles. Esta sentencia podría aplicarse perfectamente al partido que han disputado Concarneau y Guingamp. Los visitantes, que partían como muy favoritos, sufrieron durante los primeros 45 minutos y fueron muy superiores en la segunda mitad, pero únicamente un gol en el tiempo de descuento les dio el pase a la penúltima ronda de la Copa de Francia. Anteriormente, Mandanne había adelantado a los visitantes y Gourmelon había establecido el empate en el electrónico.

Goles tempraneros

Sin apenas tiempo para que los jugadores se asentaran sobre el terreno de juego, el Guingamp se adelantó en el marcador. En el primer saque de esquina del encuentro, el centro de Giresse fue despejado por la defensa local. El balón llegó hasta Sankharé, que controló con el pecho y remató de volea. El balón se quedó sobre la línea, Mandanne terminó de introducir el balón en la portería y establecer el 0-1 en el marcador. El partido se animó a raíz del gol y los locales no se vinieron abajo, y reaccionaron rápidamente con una clara ocasión de gol. Centro de Richetin desde la derecha que remata Gégousse, pero Samassa realizó una excelente intervención para evitar el empate.

El Concarneau decidió presionar de manera agresiva la salida de balón del Guingamp, llegando incluso a sorprender a los visitantes. Esto propició recuperaciones de balón en zonas adelantadas, lo que se tradujo en acercamientos al área defendida por Samassa. Los locales lo intentaron también a balón parado, pero el remate de Drouglazet se marchó lejos de la portería visitante. El ímpetu de los locales siguió haciendo acto de presencia y, finalmente, el esfuerzo del Concarneau tuvo su recompensa. En el minuto 22, de nuevo Richetin apareció por banda derecha, pero esta vez colocó un centro raso al punto de penalti que Gourmelon remató a la red.

Los visitantes intentaron reaccionar e igualaron la intensidad del choque, con lo que ambos equipos disfrutaron de llegadas al área rival. Sin embargo, el Guingamp seguía sin estar cómodo sobre el césped del Stade Yves-Allainmat, y los locales siguieron aprovechando esa incertidumbre para crear ocasiones. Un error de Kerbrat propició una nueva ocasión clara para el Concarneau, pero el remate de Gargam tras una excelente acción individual fue detenido por Samassa. Las oportunidades continuaron sucediéndose para los locales, que se mostraron muy superiores a sus rivales en esta fase del encuentro. Gran jugada de Gourmelon, que asiste a Le Joncour y éste ejecuta un disparo demasiado cruzado.  Antes del descanso, el Guingamp también tendría un par de oportunidades para volver a adelantarse en el partido, pero los disparos de Pied acabaron siendo repelidos por Seznec.

Acoso y derribo

Tras el paso por los vestuarios, el encuentro continuó con la misma intensidad que en los primeros 45 minutos. Así, a los dos minutos de la reanudación, un contraataque del Guingamp liderado por Mandanne estuvo cerca de llegar a buen puerto si no hubiera sido por los reflejos de Seznec. A raíz de esta ocasión, los visitantes comenzaron a acercarse continuamente con peligró al área de Concarneau, que se defendió como pudo de los intentos del Guingamp. Con el tridente ofensivo formado por Douniama, Pied y Mandanne, cada uno tuvo en sus botas la posibilidad de conseguir el tanto, pero la falta de acierto en los últimos metros impidió tal situación.

Los locales lo intentaban a balón parado, pero el control del partido era totalmente favorable al Guingamp, que comenzó a asediar el área rival. Beauvue saltó al terreno de juego por Douniama y dio un nuevo aire al ataque visitante, que siguió llegando con peligró a la portería defendida por Gassama. Sólo la falta de puntería privó al recién entrado y a Mandane colocar el 1-2 en el marcador, pero lo cierto era que los minutos pasaban y todo se encaminaba hacia la prórroga. La afición local veía con buenos ojos la llegada del tiempo extra, donde podían aprovechar un error del Guingamp para conseguir una ventaja que resultara definitiva.

Sin embargo, en el tiempo de prolongación, la hinchada del Concarneau se quedó helada. Beauvue ejecutó un magistral lanzamiento de falta ante el que nada pudo hacer Gassama y colocó el definitivo 1-2 en el electrónico, privando al modesto equipo francés de disputar por primera vez unas semifinales de la Coupe de France.