Nuevo empate de la Lazio, el tercero en cinco partidos, el segundo a cero goles. Falta gol en el equipo de Pioli, aunque no es por falta de delanteros. Hasta cuatro, contando a Keita, jugaron algún minuto, pero, aunque Matri anotó dos, ninguno válido, la efectividad no es la marca del equipo laziale. El Udinese queda en decimoquinto lugar, con 25 puntos, se enfrentará este miércoles al Empoli. La Lazio, octava, recibirá al líder en el Olímpico, también el miércoles. Difícil compromiso para los de Pioli, a pesar de las victorias ante Fiorentina e Inter en los últimos compromisos difíciles.
Fría primera parte en Udine
Arrancó el partido con una Lazio dormida, como suele ser habitual y un Udinese que trató de sorprender a su rival en los primeros minutos de juego. Pudo llegar el primero tras una falta de Bisevac que fue rematada posteriormente por Wague. Se marchó desviado el testarazo. El propio Bisevac supuso, con su lesión el primer problema para Pioli. El central serbio tuvo que ser sustituido por Maurício cerca del minuto 10 de partido. A partir de entonces, el balón empezó a ser de una Lazio que no lograba crear demasiado peligro para la meta de Karnezis.
Siguió el encuentro frío, flojo, como están últimamente estos dos equipos, aunque con una Lazio más ambiciosa. Y en el minuto llegó una de las dos acciones más importantes para el devenir el encuentro de la primera parte. Edenilson, tras varios rechaces en el área laziale, transformó un tanto que no subió al marcador por el claro fuera de juego de su compañero, que le había regalado el gol. Se llevó un buen susto la Lazio cerca de la primera media hora de partido.
La otra acción clave de la primera parte, que dejaría casi sin opciones de victoria al Udinese, llegó cerca del descanso. Danilo, que ya tenía una tarjeta amarilla, entró duramente a Djordjevic, suponiendo su expulsión, además de la lesión del jugador serbio que tuvo que dejar paso a Matri, en el 44 de la primera mitad. Terminó así un primer acto que dejaba a los visitantes muy satisfechos. Jugarían la segunda mitad con un hombre más.
Dos goles en el Friuli, ninguno válido
El guión estaba escrito en Udine tras el final de la primera parte. Una Lazio necesitada de la victoria para seguir subiendo posiciones en la tabla buscaría el gol ante un Udinese con uno menos que trataría de conservar al menos un punto. Pero es lo que tienen los guiones, que se cumplen, o no, o a medias.
Y los goles llegaron para la Lazio. A falta de uno, dos; pero ninguno subió al marcador. Ambos tantos llevaron la marca de un Alessandro Matri que parece el delantero con más garantías en este momento, con mucho que explotar aún en su paso por el conjunto romano. Un claro fuera de juego que el italiano aprovechó marcando un gran gol fue el primero. El segundo, una dudosa falta en ataque que impidió que su testarazo subiera al marcador. La tuvo también Cataldi con un buen disparo raso desde la frontal que se marchó fuera, pegado al palo derecho de la portería de Karnezis.
Pensó Colantuono, y pensó bien, que su equipo necesitaba cambios para soportar lo que quedaba de partido. Y actuó, haciendo los tres cambios en 15 minutos, antes del 70 de partido. Pioli, con dos cambios hechos ya por sendas lesiones de Bisevac y Djordjevic decidió sacar al campo a Klose, a falta de 15 minutos para el final. Otro partido más en el que los tres delanteros cuentan con minutos. Ni un minuto jugó un Felipe Anderson que, definitivamente ha perdido la titularidad a manos de Keita a pesar de quedarse, al menos hasta junio, en el equipo de Pioli. 15 minutos que se esperaban, como no podía ser de otra manera, de claro asedio laziale.
La tuvo Konko en el 80 de partido tras un centro que nadie logró rematar y que le quedó perfecto para un cabezazo picado. No acertó el francés, mandando el disparo fuera. Pero la determinación del equipo capitolino por llevarse los tres puntos de Udine pudo costarle un disgusto. Arrancó Thereau desde tres cuartos de campo y nadie le paró. Aguantó bien Berisha para mandar el balón a córner. Un saque de esquina que, antes de sacarse, tenía reservado la polémica. Se quejó un central local de un codazo de Matri que en ningún momento existió. Decidió Celi mostrarle la roja directa al jugador visitante dejando el partido, a falta de cinco minutos, con diez hombres de cada equipo sobre el campo.
No se movió el marcador aunque lo intentó la Lazio hasta el final. Reparto de puntos en Udine que no le viene mal al Udinese, al haber jugado toda la segunda parte con diez y que deja a los locales decimoquintos, con 25 puntos y a la Lazio octava con 32, a uno de puestos europeos.