La apertura de la jornada 24 tenía lugar en Breda, donde dos equipos urgidos por el triunfo se veían las caras. Los locales, metidos de lleno en la pelea por el descenso habían caído en La Haya la semana pasada, mientras que el visitante venía de una motivadora victoria en el derby de Frisia, pero tres derrotas previas a ese encuentro marcaban notablemente la necesidad de goles y puntos que tenían.

Arrancaba el encuentro y el conjunto de Robert Maskaant volvía a presentar un cambio notable en la alineación, no por los cinco mediocampistas, sino más bien por los nombres, en un hecho que evidencia la urgencia del club por sacar adelante una temporada que se les ha complicado mucho a pesar del optimismo que se había generado al inicio tras la ambiciosa inversión realizada. El nerviosismo general empezaba a hacerse presente entre la afición local inclusive antes de arrancar el encuentro.

El equipo local, que no sabía qué era la victoria desde el pasado 6 de diciembre, empezaba con un gran susto el encuentro, puesto que fue el conjunto de Leuuwarden el primero que avisaba de cara a portería con Reijnen, quien puso a trabajar al veterano guardameta Ten Rouwelaar. Tras el susto, el conjunto local empezaría a empujar hacia adelante para encontrar espacios pertinentes, los cuales se empezaron a dar en el mismo primer tiempo. Constantes avances se empezaron a ver hacia la portería de Nienhuis con las salidas desde la defensa que Van der Weg empezaba a generar, dándole a De Kamps en el centro del campo un rol muy importante para encontrar a sus compañeros más inclinados hacia las bandas. Pensaban más las jugadas y recorridos, pero todavía faltaba ese grito de la afición, ya sea de celebración o de angustia.

Para el NAC Breda la figura de Guyon Fernández empezó a tomar mucha fuerza durante el pasar de los minutos, comunicándose con Swerts a la perfección, quien en una ocasión logró habilitarlo con un pase medido, pero el árbitro no dudó mucho en levantar el banderín señalando el fuera de juego. Las aventuras ofensivas del local no parecían tener respuesta alguna del Cambuur, quien luego de la primera ocasión de Reijnen desistió de ir hacia adelante, restándole espectáculo al compromiso. A pesar de todo esto, el veterano delantero Ogbeche tuvo la ocasión más clara para anotar en todo el primer tiempo, cuando justo antes del descanso logró realizar un cabezaso, pegando en el poste ese balón.

El NAC Breda no ganaba un partido en casa desde agosto

Se esperaba un complemento un poco más intenso tras los dubitativos 45 minutos que habían quedado atrás, pero lo cierto es que el ritmo y nivel del partido se fue reduciendo cada vez más, dejando un compromiso más ríspido que cualquier otra cosa, siendo, como de costumbre ya en la campaña, Joeri de Kamps protagonista con faltas bastante fuera de momento, siendo amonestado a lo poco del segundo tiempo.

No fue hasta el minuto 64 que cayó el primer gol del partido por medio de Adnane Tighadouini. Una jugada rápida que nació por la banda derecha tomó verticalidad rápidamente, llegando hasta una distancia poco menor a diez metros del área chica, donde De Zeuuw tocó el balón para dejar en bandeja de plata el gol al delantero marroquí. La celebración desde la grada fue más que notable para un gol que rompía una racha de 567 minutos en los que el conjunto geel en zwaart no había podido hacer un gol en casa. Como era de esperarse, los visitantes empezaron a empujar su juego hacia adelante, pero no encontraban la serenidad para que la posesión de balón se convirtiese en ocasiones de gol. El estratega Henk de Jong empezó a mover sus fichas, entre las cuales se encontraba el veterano delantero Michiel Hemmen, quien poco o nada realmente pudo aportar a la causa de un equipo con limitadas llegadas profundas.

El segundo gol local se hizo realidad a los 87 minutos en una jugada similar a la del tanto anterior, puesto que un contragolpe iniciado por la banda derecha fue progresando hasta tres cuartos de cancha, donde el balón cruzó de un lado a otro hasta llegar a los pies de Tighadouini, quien corrió unos metros con el balón antes de amagar frente a un defensor y colocar el balón en una dirección en donde Nienhuis no le llegaría.

Los visitantes descontarían en el tiempo de agregado por medio de Bartholomew Ogbeche, quien recibió un balón de Furdjel Narsingh y con poco espacio logró cambiar el poste a Ten Rouwelaar para hacer el gol del descuento. Con este resultado, los pupilos de Maskaant quedan a la expectativa de lo que puedan hacer Heracles y Go Ahead Eagles, sus rivales directos en la batalla por no descender y evitar el play-off de promoción.