Este viernes se vieron las caras en el Euroborg dos equipos caracterizados esta temporada por su capacidad goleadora y verticalidad para lastimar al rival que tuviesen enfrente, pero tras finalizados los 90 minutos un empate sin goles deja un sabor agridulce para quienes tantas expectativas tenían sobre este compromiso y evidentemente para las escuadras que pelean cosas importantes dentro de los primeros diez de la clasificación general.
Por un lado estaba el Groningen. El equipo anfitrión venía de sufrir el pasado domingo un duro revés en su propia cancha ante el Utrecht, el cual le propinó cuatro goles. Para los dirigidos por Edwin van de Looi la misión era clara: volver a ganar; porque más allá de lo que representaba darle una alegría a su afición, los puntos no podían dejarse perder con miras a los rivales directos que todavía tenían compromisos por darse.
Quien llegaba a hacer la visita era el NEC. Tras una clara victoria la jornada anterior, el equipo de Nimega apuntaba al norte de Holanda con la clara idea de seguir dando la sorpresa esta temporada y aprovechar el aparente bajón que equipos como el Heracles han tenido para seguir escalando posiciones para meterse dentro de los primeros cinco lugares. Soñar no costaba nada, por lo que se esperaba un partido bastante entretenido.
Sergio Padt y el infortunio
El central del compromiso era Bas Nijhuis, el cual a las 20:00 horas exactas daba por iniciadas las actividades de la jornada 19. A pesar de los primeros minutos de igualdad, sería el visitante quien iría ganando terreno al dominar la pelota y el ritmo del encuentro en sí, tanto que lograron llevar peligro a la cabaña del guardameta local.
Como se ha hecho costumbre en el equipo de Nimega esta campaña, el bien estructurado planteamiento defensivo imposibilitó a los locales llegar con oportunidades claras durante la primera mitad. Esta desventaja de juego la aprovecharía el NEC, teniendo en los pies de Navarrone Foor, que vio su oportunidad desvanecerse debido a la gran reacción del portero Sergio Padt, siendo esta la primera de las ocasiones de peligro que sacarían un suspiro a la afición presente en el Euroborg.
Posteriormente llegaría un cabezaso del joven defensor Darío Dumic, el cual pasaría por muy pocos centímetros de la portería local. De todas las aproximaciones visitantes, sin lugar a dudas sería la del joven portugués Janio Bikel la que hizo a más de uno quitar la cara de la cancha, puesto que rebasó al guardameta Padt y disparó a portería, pero desafortunadamente su remate terminó pegando en el poste. Terminaba la primera mitad sin goles gracias al portero y al infortunio.
Sin claridad al complemento
De cara a la segunda mitad los locales reaccionarían al asedio del NEC con oportunidades de cara a la portería del recientemente contratado guardameta Brad Jones, pero fueron ocasiones que tampoco exigieron de gran manera al veterano portero australiano. Para Van de Looi su equipo estaba teniendo un déficit de profundidad por los costados, por lo cual en intercalados minutos hizo salir de la cancha a nombres como Abel Tamata y Albert Rusnák.
No cabía duda que estaba siendo más amenazante el Groningen para la segunda mitad. Michael de Leuuw tuvo un cabezaso que pasó por un costado de la cabaña de Jones como jugada de principal peligro para el local, la cual fue acompañada de algunos remates de mediana y lejana distancia a ras de suelo, pero que tampoco podrían considerarse como oportunidades tan claras. Cuando faltaban 15 minutos para el cierre del encuentro ambos equipos adelantaron líneas para buscar el partido, lo que podía propiciar jugadas a la contra.
Cerca del final Anthony Limbombe tuvo la oportunidad de dar la victoria a los visitantes con un importante contragolpe, pero el buen reaccionar de la defensa local hizo que ejecutara de pobre manera. Con este resultado, los Boeren se mantienen novenos de la tabla, mientras que en el quinto lugar está el club de Nimega. Esta sequía de goles les podrá costar sus puestos debido al resto de encuentros que presenciará la fecha.