El Leicester City celebraba el título en casa ante el Everton, después de que el Tottenham se dejara dos puntos el pasado lunes en Stamford Bridge ante el Chelsea (2-2). Lo que pocos podían pensar, aunque después de la consecución del título todo es posible, es que el Leicester cuajara un partido tan completo pese a las fiestas que habían tenido a lo largo de la semana.
En nuestra cuenta de Twitter @InglaterraVAVEL los lectores decidieron premier también al delantero de los foxes con un 66% de los votos a pesar de las grandísimas actuaciones de sus contrincantes por el MVP de la jornada.
Todo se puso de cara para los hombres de Ranieri cuando solo habían pasado 5 minutos de encuentro. La conexión argelino-inglesa de los zorros volvió a funcionar: Riyad Mahrez sirvió un centro con una rosca perfecta al corazón del área visitante, y entre los centrales apareció Jamie Vardy para rematar a bocajarro el disparo que suponía el primero del partido.
Entre tanto, Andy King aumentó la renta y Jamie Vardy continuaba con su pelea particular por conseguir el trofeo de máximo goleador de la competición. Sólo estaba a dos tanto de Harry Kane, cuando ya en la segunda mitad, y de forma muy inteligente, provocó un penalti ante el inexperto Pennington. Vardy golpeó con potencia desde los once metros y batió a Joel Robles, para posteriormente realizarle una mueca que el portero español no se tomó demasiado bien; cosas de Vardy.
Poco después, una inocente entrada de Gibson sobre Schlupp le pudo valer el empate con Kane en la clasificación de Top Scorers de la Premier, pero no fue así. Jamie Vardy emprendió la carrera con confianza y golpeó como de costumbre, con mucha potencia. Después de seis aciertos desde los once metros en lo que llevamos de temporada, Vardy erró el séptimo al disparar muy por encima del larguero. Joel Robles celebró el fallo como si acabara de ganar una tanda de penaltis que decidía un título.
Jamie Vardy acabó el partido renqueante de la rodilla a causa de un golpe que sufrió en los últimos minutos. No obstante, esto no fue impedimento para que el ariete inglés fuera uno de los más activos de la celebración del Leicester, puesto que se merece este título como el que más. Sólo queda por ver si es capaz de superar a Harry Kane en el último partido del campeonato.