Lleno absoluto en el Caja Madrid que se volvió a volcar con su equipo una vez más para presenciar un nuevo clásico del fútbol sala nacional. Frente a frente, los dos equipos más laureados de este deporte en España y en juego, ni más ni menos, el primer punto de las semifinales del playoff por el título. El choque no defraudó a los presentes y en él se pudo ver una de las mejores versiones de Inter Movistar, que con el paso de los partidos ha ido creciendo y llega a la hora de la verdad en un momento excelente.
Equipo de ElPozo Murcia
Conjunto de Inter Movistar
Antes del arranque de partido se guardó un respetuoso minuto de silencio por el fallecimiento de María Luisa García Mera, hermana del gerente de Inter Movistar Julio García Mera.
Fabio, que reemplazó a Rafa una vez más, hizo una gran primera mitad
Los primeros minutos fueron de dominio local, Inter salió a por el partido y ahogó literalmente a los de Duda en su cancha.
Poco a poco, el conjunto charcutero fue sacudiéndose del acoso que estaba recibiendo por parte local.
Con mucha seriedad en defensa, el conjunto murciano fue alternando el ataque con el conjunto rival.
Oitomeia, tras una gran jugada personal, se escapó del marcaje de Kike e hizo el pase de la muerte para que Gadeia, que estaba esperando en el centro del área rival, rematase a placer.
El look mostrado por el brasileño esta semana dejó a todos con esa enorme sonrisa de su cabellera.
Nada mas salir en la segunda mitad, y tras varios sustos de Elpozo por mediación de Kike y Paulinho, Bateria a los paralizó al conjunto murciano; y veinte segundos más tarde Rafael haría lo propio para poner el marcador en 3-0
Después de una gran galopada y con Elpozo Murcia volcado al ataque consiguió Ortiz anotar el 4-0 y dedicárselo de esta manera tan especial a Mari García Mera.
Rafael portaba mascarilla, tras la fractura sufrida la semana pasada en un choque fortuito en el partido contra Triman Navarra
Los de Duda ya con el partido perdido apostaron por el ataque de cinco para intentar acercarse en el marcador
De varias oportunidades más dispuso Inter antes del final, que fueron desaprovechadas gracias a la gran labor de Fabio