La dictadura sigue en pie

El Fútbol Club Barcelona Alusport demostró que se niega a dejar de ser el mandamás del fútbol sala español ante un Burela rebelde que creyó en sus opciones de rascar en el Palau hasta que Lin puso la puntilla, a falta de 23 segundos para la conclusión del encuentro (Foto: Ernesto Aradilla | VAVEL.com)

La dictadura sigue en pie
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Por Iván Díaz Rolle

La dictadura blaugrana en el fútbol sala español, en contra de lo que muchos pensaban, goza de buena salud. Las dudas surgidas en la primera mitad de temporada se disipan cada vez que Fernandao pisa el balón, Sergio Lozano cambia de ritmo o la pelota se estrella contra Paco Sedano. Se hace difícil pensar que los de Marc Carmona puedan recortar los cinco puntos que los separan de Inter Movistar, pero el trono se juega en la Copa y los playoff y, ahí, la ventaja alcalaína será poco más que anecdótica.

El equipo de la capital catalana ofreció su mejor versión para derrotar a un Burela, por momentos, respondón y con más fe que juego. Es bien cierto que sería harto complicado que el conjunto de Juanlu Alonso llegase vivo a los últimos 23 segundos de encuentro de no ser por la superlativa actuación de su arquero Álex, pero también que, en más de una ocasión, Sedano evitó que el partido se complicase para los culés.

Represión a un insolente Burela

“Si hemos ganado en Murcia, ¿por qué no vamos a poder repetir en Barcelona?”, había manifestado horas antes del encuentro Juanlu Alonso. Y ya saben cómo son los dictadores: ante las disidencias, represión. Bastó una buena acción de Antoñito, que remató fuera tras dejar atrás a su par, para despertar a la bestia.

Un torrente de fútbol sala arrolló al equipo gallego. Prácticamente todos los jugadores culés gozaron de oportunidades para adelantar a los suyos antes del ecuador de la primera mitad, pero unas veces por la imprecisión en el último pase, otras por la falta de puntería y otras – muchas – por el acierto de Álex, habría que esperar al minuto diez para presenciar el primero del partido. Cinco jornadas después, Álex celebró con una actuación brillante su vuelta a la titularidad en liga, pero nada pudo hacer tras un pase de la muerte de Sergio Lozano para que Wilde pusiese el uno a cero.

Álex fue el mejor de los suyos en su vuelta a la titularidad

El tanto sirvió a los gallegos para recordar que habían ido a Barcelona para acabar con el autoritarismo catalán. La réplica fue inmediata, pero Paco Sedano hiló más fino que Burrito en el uno para uno. Luego, Matamoros se topó con el larguero. Sin embargo, la reacción naranja, no dio para más.

Una vez disuelta la revuelta, el Barça se fue a por más. Pudieron ampliar las diferencias Lozano, por dos veces, y Gabriel, pero Álex se negaba a haber viajado a Barcelona para dejarse vencer tan fácilmente.

Al descanso se llegaría con un aviso de Burrito, que se encontró a Sedano en la finalización de una contra muy bien llevada por Isi. El resultado era corto para los méritos del Barcelona Alusport, pero la sensación era de que a Burela aún le quedaba mucho por decir.

Fernandao lo tenía todo bajo control

Los culés dominaban, pero eran incapaces de acabar con la rebeldía mariñana. Por ello, Marc Carmona aprovechó el descanso para dejar claro a Fernandao que solo él podía encargarse de tan ardua labor. Poco más de un minuto tardó el hispano-brasileño en dejar su sello. Recibió de Lin, dentro del área, y superó a Álex con un toque tan sutil como efectivo que ni Matamoros ni Burrito acertaron a despejar. Para enmarcar la segunda mitad del pívot del conjunto local.

Mimi, portero-jugador con 18’ por delante

Pero los continuos golpes recibidos no iban a hacer que la sublevación mariñana terminase tan pronto. Si algo le sobra al conjunto de Juanlu Alonso es valentía y, con el mejor equipo del mundo enfrente, no quedaba otra que arriesgar. Mimi, curtido en mil batallas como la de hoy, se enfundó su camiseta azul y comenzó a ejercer como portero-jugador cuando el luminoso mostraba aún 18 minutos para la conclusión.

Nunca bajó los brazos la expedición gallega. Gozó de varias ocasiones, las más claras en los pies de Antoñito, Juanma y Burrito, pero Paco Sedano ya había construido un muro infranqueable justo delante de su portería.

Pudo acabar con la historia mucho antes el Barça, lo terminó haciendo a falta de 23 segundos, por mediación de Lin, que se aprovechó de un error de los naranjas en el juego de cinco.

El Burela vuelve de vacío a A Mariña, con la satisfacción de haber dado la cara y convencido de que tendrá más oportunidades para acabar con el régimen dictatorial azulgrana, ¿quién sabe si en los playoff?

Fotos: Ernesto Aradilla

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