ElPozo Murcia consiguió su tercera victoria de la temporada ante un Aspil-Vidal que empezó el partido con mucha intensidad pero que poco a poco se fue desinflando futo de los goles del conjunto charcutero. Con esta victoria ElPozo se sitúa en 2ª posición con 10 puntos, mientras que Aspil-Vidal Ribera Navarra baja hasta la 12ª posición con 4 puntos.
La intensidad fue la nota predominante durante prácticamente todo el encuentro. El partido daba comienzo sin tener un dominador claro, Aspil-Vidal llevaba la iniciativa del balón pero la asfixiante presión de los murcianos arriba hacía que que los navarros no pudieran sacar el balón jugado con facilidad. A pesar de esto, Aspil-Vidal a punto está de marcar el 1-0 en una doble ocasión de Roger que Fabio desbarata con dos grandes intervenciones. A partir de ahí, el partido se convierte en un correcalles que Jesús Izquierdo aprovecha para poner el 1-0 en el luminoso tras culminar una contra justo después de que ElPozo estrellara un balón en el palo que podría haber supuesto el 0-1.
ElPozo toma la iniciativa de partido
Tras el gol, Aspil-Vidal dejó la iniciativa del partido a ElPozo, que comenzó con el asedio a la meta del aragonés Juan Molina, el mejor de los navarros en el día de ayer. Franklin, Raúl Campos y especialmente Miguelín fueron los más incisivos en el ataque murciano,estando a punto de conseguir el empate en numerosas ocasiones que Molina se encargaría de desbaratar.
Tras el gol inicial, Aspil-Vidal se encerró atrás
Con ElPozo volcado en ataque, "Pato" decidió pedir tiempo muerto para frenar las numerosas acometidas del conjunto murciano. Al poco tiempo de la reanudación, en el minuto 13, Gréllo se saca un derechazo desde más de diez metros frente al que Molina no puede hacer nada para evitar el empate. Tras el gol, Aspil-Vidal siguió sin salir de su campo a excepción de alguna contra aislada sin mayor peligro. Tras un robo del brasileño Eka en el área rival, Raúl Campos marcaría a placer el 1-2 poniendo a ElPozo por delante. Con este resultado, que se quedaba corto teniendo en cuenta las numerosas ocasiones de las que dispuso el conjunto murciano, se llegaba al descanso.
Segunda parte y más de lo mismo
En la segunda parte el partido se desarrolló de una forma similar a la primera. ElPozo llevaba la iniciativa del balón y Aspil-Vidal sólo llegaba a la meta defendida por Fabio a través de contras aisladas, si bien es cierto que el conjunto tudelano nunca le perdió la cara al partido gracias a la intensidad que pusieron sobre la pista azul.
Tras varias ocasiones donde Molina se encargó de que los murcianos no ampliaran la ventaja, Lima ponía el 1-3 en el luminoso tras un potente y colocado disparo a la salida de un corner. A partir de entonces, el partido se convirtió en un ir y venir de ocasiones para ambos conjuntos. Eka mandaba el balón al palo en el minuto 31, mientras que Hamza a punto estuvo de recortar distancias, pero una gran intervención de Fabio, que con una espectacular mano frenó el impulso del pie de Hamza prácticamente sobre la línea de gol, evitó el segundo. Joselito más tarde también obligaría a intervenir a un seguro Fabio.
Sentencia y portero-jugador
En esta locura en la que se había convertido el encuuentro, Miguelín ponía un poco de cordura anotando en 1-4 con otro gran disparo desde fuera del área donde Molina no pudo hacer nada por evitarlo. "Pato", sin nada que perder, decidió dar entrada al portero-jugador, algo que a la postre no le serviría de mucho. David García, del Aspil-Vidal era expulsado por un claro agarrón cuando Raúl Campos se iba en solitario ante una desierta portería.
Con uno menos, Lima aprovecharía un rechace de Molina para marcar el definitivo 1-5 en el minuto 34. A partir de ahí, el partido bajó de intensidad, aunque el conjunto tudelano tuvo la oportunidad de recortar distancias en un doble penalti que Andresito erraba. Con el 1-5 en el marcador se llegaba al final del encuentro y ElPozo lograba los tres puntos de una forma más que merecida, aunque hay que destacar la actitud del conjuto de la Ribera de Navarra, que nunca bajó los brazos durante el encuentro.