Inter Movistar dio un tremendo golpe de autoridad en el Palau Blaugrana dejando atrás, si todavía quedaba alguno, todos los fantasmas del pasado en sus duelos ante el FC Barcelona. Después estar sufriendo en sus carnes en estos últimos años el rodillo blaugrana, los interistas consiguieron desquitarse de todo lo vivido eliminando al Barça por primera vez en la historia en la Copa del Rey, ganando tres años después en el Palau y enlazando su cuarta victoria consecutiva ante el cuadro catalán.

Con un Palau Blaugrana entregado a la causa, el FC Barcelona comenzó dominando el juego, si bien es cierto que no lograba crear excesivo peligro a la puerta defendida por Jesús Herrero, que una vez más estuvo a un gran nivel. Los de Velasco llegaban con una ventaja de dos goles al partido de vuelta y, lo más importantes, con las ideas muy claras de cómo le tenía que jugar al cuadro de Marc Carmona, que ha encontrado en los complutenses una oposición que, a día de hoy, no son capaces de superar.

El primer tanto del choque llegó en el primer ataque claro de los visitantes. Ricardinho asistía a Pola y el gallego, una vez más, no perdonaba ante Paco Sedano. Inter Movistar afianzaba su ventaja en la eliminatoria pero acto seguido llegaba el empate barcelonista. Bateria, en su primer partido ante su exequipo y que fue el más destacado de su plantel, botaba una falta a Wilde, que la ponía en la escuadra derecha de la portería madrileña.

Foto: FC Barcelona

Con 1-1 en el marcador, el Barça volvía a estar a dos goles de conseguir levantar la eliminatoria, la cual se iba complicando con el paso de los minutos por el buen hacer en defensa de los de Velasco. Poco a poco, los blaugranas se iban diluyendo, mientras que los visitantes comenzaban hacer honor a su denominación de Máquina Verde (en esta ocasión más que nunca, jugando con sus tradicionales colores).

Superado el ecuador de la primera mitad llegó la primera gran estocada de Inter Movistar. Cardinal, a la media vuelta, ejecutaba a Paco Sedano y ponía el 1-2 en el electrónico, resultado que obligaba al Barça a hacer tres tantos para igualar la serie. Los de Carmona eran incapaces de crear peligro y los de Velasco manejaban el juego a su antojo, haciendo pasar los minutos y acercándose cada vez más a la final. Antes del descanso, Sergio Lozano tuvo el empate en un doble penalti, algo que podría haber sido fundamental para el devenir del encuentro en su segunda parte. Su disparo lo sacó, ¡cómo no!, Jesús Herrero, uno de los héroes de la semifinal.

En la reanudación, llegó el vendaval de Inter Movistar. Incapaces de recortar diferencias, el FC Barcelona vio como se escapaba definitivamente el estar en la final por quinto año consecutivo cuando Daniel empujaba en línea de gol un disparo de Rivillos. Acto seguido, para rematar la faena, Ricardinho batía a Paco Sedano con una espectacular vaselina.

Foto: FC Barcelona

1-4 y el Barça a seis goles de levantar la semifinal. Y con trece minutos de sufrimiento por delante. Las llegadas interistas eran constantes y solamente Paco Sedano evitaba que el resultado fuera aún más abultado. Los del Palau bajaron los brazos, momentáneamente, y los de Jesús Velasco campaban a sus anchas por una cancha que, hasta la fecha, era inexpugnable.

En el ecuador de la segunda mitad, Marc Carmona situó a Saad como portero-jugador y el Barça reaccionó. No para levantar la semifinal, que ya era imposible, pero sí para al menos luchar por el partido. Dos tantos consecutivos, de Bateria y Rafa Usín -dos exinteristas-, pusieron el 3-4 y obligaron a trabajar muchísimo en defensa a los alcalaínos.

Foto: FC Barcelona

Con el tanto de Lolo, que significó el 3-5 con un disparo desde su cancha a puerta vacía, se cerró definitivamente un partido que acabó con una lección de deportividad del Palau Blaugrana, que supo aceptar la superioridad rival y, de paso, quiso rendir homenaje a su equipo, que tantas alegrías les ha dado en estos últimos tiempos. Liderados por los Dracs, la afición barcelonista mostró su gratitud a sus jugadores en un acto que quedará en el recuerdo por mucho tiempo.

Por su parte, Inter Movistar, el triunfador de la noche, conseguía el billete para la final de la Copa del Rey por segunda vez en su historia. En mayo, ante Marfil Santa Coloma o ElPozo Murcia, tendrá una nueva oportunidad de conquistar el único trofeo que falta en las abarrotadas vitrinas de la entidad de Alcalá de Henares.