Este próximo domingo se verán las caras Osasuna y Sevilla en Pamplona. Con motivo de este partido, desde Vavel queremos recordar detalles de la estancia de Lolo en el equipo que le ofreció la oportunidad de debutar en Primera División.
Carrera deportiva
Lolo nació en Huelva el 22 de agosto de 1984. El Sevilla Atlético se fijó en él y así comenzó su carrera futbolística, allá por la temporada 2003/04. En la cantera hispalense permaneció durante 5 temporadas bajo las órdenes de Manolo Jiménez, en las que destacó el ascenso conseguido a Segunda División en la 2006/07 donde marcó el gol decisivo ante el Burgos CF.
Precisamente el técnico arahalense fue el encargado de hacerlo debutar en la máxima categoría del fútbol español frente al Deportivo de la Coruña. También lo llegaría a hacer en la Champions League frente al Slavia de Praga, partido que acabó con victoria sevillista por 3-0.
En la 2008-09, ante la falta de oportunidades, llegó a un acuerdo con el club hispalense para marcharse cedido al Málaga. En el club malacitano cuajó una buena temporada jugando casi el 70% de los partidos y siendo fijo en el doble pivote con Apoño.
De esta forma, volvió al Sevilla confiando que lo logrado en el Málaga le sirviera de catapulta para dar el salto definitivo en el club de Nervión. Sin embargo, en la temporada 2009/10 Lolo solo llegó a jugar 4 partidos, hecho que provocó que se decidiera a cambiar definitivamente de aires. El equipo malagueño quería contar de nuevo con sus servicios, pero finalmente una oferta de 4 años de Osasuna sedujo más al futbolista y el equipo navarro se convirtió en su nuevo destino.
En el Sevilla no acabó de cuajar
Lolo era un hombre de cantera y eso en el Sevilla se tiene muy en cuenta. Quizá la obligación que se autoimponía por hacerlo bien, le hizo tener un paso menos marcado en el primer equipo. Eso le llevó también a que nunca tuviera un gran reconocimiento de la afición, aunque él siempre tuviera detalles de agradecimiento con la gente que lo apoyaba.
Otro de los factores que influyó fue la competencia que tenía en esos momentos en sus demarcaciones. El equipo sevillano contaba con una pareja de centrales formada por Squillaci y Escudé que le aportaban mucha solidez, además de un Zokora que por aquellos momentos era un ídolo en las gradas del Sánchez Pizjuán. En definitiva, un equipo que se proclamó campeón de la Copa del Rey en aquella temporada. Todo este cúmulo de circunstancias provocaron que el onubense buscara fortuna en el conjunto pamplonica.
Futuro incierto
Tras tres temporadas en las que ha ido convenciendo a sus distintos entrenadores, Lolo sufrió a comienzos de este mes una rotura del ligamento interno de su rodilla izquierda, una grave lesión que le mantendrá alejado de los campos de fútbol lo que queda de temporada, lógicamente, aunque también puede que se pierda el comienzo de la siguiente.
Esto hay que sumarlo a la complicada situación deportiva del conjunto rojillo. Osasuna no puede empezar a planificar la siguiente campaña, ya que todo va a depender de si el equipo de José Luis Mendilíbar consigue mantener la categoría una temporada más. El mediocentro defensivo es del gusto del técnico vizcaino y si el equipo se mantiene en la Liga BBVA el onubense seguirá entrando en las convocatorias de Osasuna.
En conclusión, el futuro de Lolo está a un nivel parecido al de Osasuna. Muchos factores pueden influir en la planificación deportiva para el próximo campeonato, pero la clave fundamental la tendrá la permanencia o el descenso pamplonica.