5 de febrero de 2006. Estadio Camp Nou, 22:00 horas aproximadamente. Jugadores colchoneros y azulgranas se marchan a vestuarios tras finalizar el partido correspondiente a la 22ª jornada de Liga de la temporada 2005/2006. Los primeros, satisfechos con la victoria conseguida frente al Barcelona por 1-3 con goles de Maxi Rodríguez y Fernando Torres (por partida doble), no podían intuir que, ocho años después, aquella sería la última victoria del Atlético de Madrid en el estadio culé hasta el día de hoy.
En aquel encuentro que disputó el Atlético, que se encontraba en 11ª posición a 23 puntos del líder (el propio Barcelona al que venció), el entrenador rojiblanco Pepe Murcia, en el minuto 74, dio entrada a un jugador para disputar los minutos que restaban. Un jugador que, con 1-2 en el marcador, salía al terreno de juego para dar equilibro al centro del campo y amarrar los tres puntos: Gabriel Fernández “Gabi”. El actual capitán rojiblanco no era el mismo jugador que es hoy en día. Hoy nadie lo pondría en el banquillo. Hoy es el pulmón de un equipo que aspira a romper la racha negativa del Camp Nou. Desde aquella victoria, nueve intentos fallidos. Nueve visitas a territorio culé sin el premio de la victoria. En los últimos ocho años, esas nueve visitas al estadio azulgrana han supuesto siete derrotas y dos empates en el cómputo general. Los dos empates fueron el primer encuentro después del mencionado partido y el pasado 28 de Agosto en la vuelta de la Supercopa de España (0-0). Los siete partidos restantes, siete derrotas. Alguna de ellas de desagradable recuerdo para el aficionado atlético, como el 6-1 de la temporada 08/09, el 5-2 de la siguiente o el 5-0 de la 11/12. En total, 30 goles a favor del Barcelona y nueve para los colchoneros. Pero las estadísticas y las rachas negativas están para romperlas. Porque ese Atlético no era este Atlético. Porque aquel Gabi no era este Gabi. Hoy es el capitán de un equipo que, magistralmente dirigido por Diego Pablo Simeone, es sinónimo de entrega, lucha y sacrificio colectivo por encima de lo individual. Un equipo que, además de defender muy bien, también sabe atacar. Y también muy bien. Un equipo con mayúsculas que buscará revertir esa racha negativa de nueve partidos sin ganar en el Camp Nou y que, capitaneado por aquel jugador que salió en el minuto 74 de aquel 5 de febrero de 2006, buscará repetir hazaña en el estadio blaugrana para hacer historia en la máxima competición continental.