El espíritu de Luis Aragonés

En el que puede ser el partido más importante de la historia del Atlético de Madrid, hay alguien que acompañará cada gota de sudor de los jugadores rojiblancos. Lo hará quién disputó la única final de Copa de Europa colchonera hasta la fecha. Luis Aragonés.

El espíritu de Luis Aragonés
Foto: Jaime del Campo - VAVEL.com
marcosgimeno
Por Marcos Gimeno

Los aficionados del Atlético de Madrid muy difícilmente podrán olvidar este año. Un año en el que este irrepetible grupo de jugadores dirigidos por Diego Pablo Simeone, les ha devuelto a lo más alto. Este grupo, y este magnífico entrenador, que tantas alegrías nos había dado en estos últimos años con la conquista de cuatro títulos europeos (dos Europa Leagues y dos Supercopas de Europa), una Copa del Rey y las meritorias clasificaciones para la máxima competición continental; la Champions League, ha superado las expectativas este curso.

Porque esta es la campaña en la que, 18 años después del histórico título de Liga de la 95/96, el Atlético de  Madrid ha vuelto a conseguir el campeonato liguero. Y lo hace en un contexto en el que parecía imposible para cualquier equipo que no fuera el Real Madrid o el Barcelona. Acostumbrados a la supremacía del binomio formado por merengues y culés en los últimos años, con presupuestos inalcanzables para el resto de equipos españoles y fichajes que superaban las tres cifras (en millones de euros), el conjunto rojiblanco se ha impuesto en una temporada que algunos consideran propia de cualquier epopeya griega.

Porque esta es la campaña en la que, 40 años después, el Atlético de Madrid vuelve a disputar una final de Copa de Europa. Cuatro décadas sin llegar a la final del que para muchos es el título entre los títulos. El trofeo que encumbra al mejor equipo del continente, en una competición en la que sólo están llamados a participar la élite del futbol europeo. Lo hizo el  15 de mayo de 1974 en el Estadio Heysel de Bruselas (Bélgica) ante el Bayern Múnich y que terminó con empate a uno tras finalizar la prórroga. Se disputó dos días después un partido de desempate en el mismo estadio, donde finalmente se impuso el equipo alemán por 4-0.

Porque esta es la campaña en la que, un jugador de aquel inolvidable equipo, el único que hasta la fecha había logrado llevar a los colchoneros a lo más alto en Europa, y que por aquel entonces ya era historia viva del club, ha pasado a convertirse en leyenda. Luis Aragonés. En el contexto en el que nos encontramos, es inevitable recordar a Luis. El de Hortaleza, que nos dejó el pasado 1 de febrero de este mismo año, ha estado, está y seguirá presente en cada paso que de este equipo. Su equipo.

Luis Aragonés, autor del único sol de aquella final de 1974, no será tan solo un recuerdo o aliciente para los jugadores colchones que hoy disputen la final de Lisboa. Más que nunca, Luis estará con ellos sobre el césped del Estadio da Luz. Los jugadores del Atlético de Madrid llevarán su nombre en el cuello de la camiseta. Precioso gesto e invocación a la leyenda por parte de los propios futbolistas rojiblancos, como así comunicaba el club recientemente: "Los jugadores trasladaron de inmediato esta bonita iniciativa de lucir el nombre de Luis en el cuello interior de las camisetas con las que jugarán la final a la directiva del Club, que quedó encantada con la idea y la aceptó sin dudarlo. Esta petición se trasladó directamente a la UEFA y a su presidente Michel Platini, que tuvo la sensibilidad de aceptarla entendiendo el significado para todos los atléticos de la presencia de Luis Aragonés en nuestra equipación".

“Zapatones”, como comúnmente se conocía a Aragonés, no sólo forjó una exitosa trayectoria como jugador, sino que lo hizo también lo hizo como entrenador colchonero. Luis es el técnico con más partidos en el banquillo del Atlético de Madrid. Y es en este aspecto en el que muchos comparan a Luis Aragonés con el actual entrenador rojiblanco; Diego Pablo Simeone.  El primero ganó tres Ligas como jugador (1965-66, 1969-70 y 1972-73) y uno como técnico (1976-77) en el Atlético. El segundo se llevó uno como futbolista (1995-96) y otro como entrenador, el conseguido este pasado sábado frente al Barcelona en el Camp Nou. También los dos han conseguido el título de Copa en ambas facetas; el Sabio se la llevó en 1965 y 1972 como futbolista y en 1976, 1985 y 1992 como entrenador, y Cholo en el histórico doblete (1996) como jugador y la temporada pasada como técnico en la imborrable final del Bernabéu. Y hoy, 24 de Mayo de 2014, escribirán una página más en común en la historia rojiblanca. Ambos habrán competido en las dos únicas finales de Champions League (anteriormente Copa de Europa) en las que el Atlético de Madrid ha participado.

Pero no sólo en el palmarés podemos comparar los. Otra de las similitudes que podemos establecer entre ambos es que, en gran medida, su filosofía se resume en dos frases que se pueden escribir en letras de oro en la historia rojiblanca.  Porque, a pesar de que las frases por las que se recordará a Luis son incontables, ninguna tendrá el peso que su famoso  "ganar, ganar, ganar y volver a ganar" con el que definió el fútbol.  Diego Pablo Simeone, por su parte, ha conseguido que la famosa consigna de “partido a partido” se haya convertido en la auténtica filosofía de la actual plantilla colchonera.

Una plantilla, la que dirige Simeone, que buscará conseguir esta noche lo que tristemente no pudo conseguir aquella del 74, en la que estaba Aragonés, quien estará presente con todos los atléticos desde lo más alto, para lo que haga falta. Y es que, como recordó el técnico argentino recientemente, "Luis Aragonés ha defendido con nosotros en la segunda parte". Hoy lo hará también si es necesario. Va por ti, Luis.