Simeone salió con el equipo B, pero eso no pareció importarle al Atlético de Madrid, que se mostró una vez más como un equipo sólido en defensa y creando ocasiones en ataque. Oblak, que no tuvo excesivo trabajo, y Raúl Jiménez, que estuvo bastante participativo, debutaron con la camiseta rojiblanca. La Sampdoria, que también salió con un equipo distinto al día anterior, mostró un nivel inferior con respecto al partido frente al Sevilla, y apenas creó peligro en la portería colchonera.
El Atlético de Madrid salió de inicio con: Oblak, Jesús Gámez, Giménez, Alderweireld, Siqueira, Carlos Ramos, Mario Suárez, Saúl Ñíguez, Cristian Rodríguez, Héctor Hernández y Raúl Jiménez.
Por su parte, el once inicial de la Sampdoria fue: Viviano Emiliano, Costa Andrea, Duncan, Fedato, Ksticic, Bergessio, Campaña, Rizzo Luca, De Silvestri, Wszolek, y Gavazzi.
Tras una buena jugada de Raúl Jiménez y un disparo suyo al larguero, Saúl remató el rechace al primer toque con la derecha cruzando el balón ante la meta de Viviano, y haciendo el 1-0 en el marcador.
La segunda mitad siguió la misma tónica que la primera. Los intentos de la Sampdoria por conseguir el empate fueron frustados, y con el partido apagado, la grada se encargó de animar el encuentro con sus cánticos.
El Atlético de Madrid acabó sentenciando el encuentro a balón parado. Un córner botado desde la derecha acabó con el balón muerto en el área pequeña, y Giménez se encargó de enviar al fondo de la red. El central uruguayo lo celebró dedicándole el gol a su futura hija.
El partido acabó con las molestias físicas de Jiménez y la ocasión más clara de la Sampdoria, que estrelló el balón en el palo.
La Sampdoria recogió el trofeo de subcampeón, mientras que Mario Suárez, capitán durante el partido, intentó levantar el de campeón. Un trofeo que anecdóticamente ha pasado la noche en Cádiz, ya que el equipo rojiblanco no pudo transportarlo debido a su gran tamaño.
El Atlético de Madrid se convirtió así en el equipo que más veces ha conquistado este prestigioso trofeo veraniego. Algunos de sus jugadores más jóvenes fueron los más entusiasmados con dicho logro.
