Real Madrid y Atlético de Madrid volverán a reeditar en el Santiago Bernabéu un duelo en la cumbre, tras los que han protagonizado ambos equipos en las dos últimas temporadas, con la final de la Champions League de Lisboa como la madre de todos los derbis, en el que los madridistas se hicieron con la tan ansiada "Décima". Los rojiblancos no han hablado de vengar la derrota en la capital lusa, pero saben que ganar la Supercopa sería una buena manera de comenzar la temporada con un título bajo el brazo. Y más si se trata del eterno rival.

Sin embargo, los números no dejan unos últimos precedentes positivos para los rojiblancos cuando se miden a su eterno rival a doble partido. En los tres últimos cruces con ida y vuelta, el conjunto de Concha Espina ha vencido en las tres ocasiones. Fueron en la temporada 1993/1994, en la 2010/2011 y en la 2013/2014, y en las dos últimas ocasiones, la eliminación rojiblanca significó que el Real Madrid logró alzarse con el título copero, algo que en el bando rojiblanco desean evitar a toda costa.

En el primero de los últimos tres enfrentamientos a ida y vuelta, madridistas y colchoneros se citaban en los octavos de final de la Copa del Rey. Los madridistas se pusieron por delante en el duelo de ida en el Bernabéu con gol de Iván Zamorano, que entró con todo para batir a Abel. Apareció en el panorama José Luis Pérez Caminero para darle la vuelta a la eliminatoria. El de Leganés protagonizó una exhibición que culminó anotando los dos goles rojiblancos en el coliseo madridista. El primero, en un tiro cruzado con la izquierda que el palo ayudó a entrar. El segundo en una contra muy buena de los rojiblancos, con un pase del asturiano Pirri al segundo palo para que Caminero empujara a gol. Empataron los madridistas de penalti, pero el Atlético se llevaba un buen resultado para la vuelta en el Vicente Calderón dos semanas después.

El Atlético ganó su última eliminatoria al Real Madrid en 1991

En el Vicente Calderón, el equipo rojiblanco no supo conservar la ventaja con la que llegaba. Primero, Butragueño adelantó a los madridistas, tras un fallo de Juanito en un pase y el posterior gran centro de Michel  para que rematara a gol el '7' madridista. Empataba dos minutos después Juanito al saque de una falta de Pizo Gómez. El central extremeño remató libre de marca en el segundo palo, pero la locura del partido prosiguió. Luis Enrique, ahora técnico del FC Barcelona, antes del descanso, volvía a marcar de cabeza para adelantar al conjunto blanco.

En el segundo periodo, Lasa firmaba el tercer gol madridista y casi sentenció la eliminatoria a falta de media hora para el final. Pedro puso emoción desde los once metros transformando un penalti a falta de más de diez minutos, pero el Real Madrid conservó el resultado y logró avanzar a los cuartos de final de la Copa del Rey.

Pasaron diecisiete años hasta que los blancos y los rojiblancos se volvieran a ver las caras en la Copa del Rey. Fue en cuartos de final, en la temporada 2010/2011, y la eliminatoria volvía a comenzar en el Bernabéu. Como en los últimos precedentes y como ocurre en esta ocasión también. Al Atlético se le ponía el partido de cara con un gol de Forlán, que aprovechó el desconcierto de un balón suelto en el área para batir a Casillas, que había cometido penalti sobre Agüero. El mostoleño tuvo fortuna, pues de no haber acabado la jugada en gol, hubiera sido expulsado antes del minuto diez de partido. También es cierto que el argentino estaba ligeramente adelantado cuando arranca la jugada.

No tardó mucho en empatar el equipo blanco. Sergio Ramos aprovechó un saque de esquina de Di María para empatar el duelo antes del cuarto de hora. Ya en el segundo tiempo, Cristiano Ronaldo adelantaba a los blancos y Mesut Özil ampliaba la ventaja en el descuento. El Atlético debía remontar dos goles, pero fue imposible. El Madrid sentenció por la vía rápida en la vuelta y avanzaba a semifinales de la competición.

El Madrid se pasea en el último precedente

No ha pasado mucho tiempo desde que se vieran las caras en semifinales del torneo copero. Ya con Ancelotti y Simeone en el banquillo de cada uno de los equipos, Real Madrid y Atlético de Madrid volvían a medir sus fuerzas en la competición del KO, en un duelo que iba a probar muchas cosas. Sobre todo, en el rojiblanco, del cual ya crecía un sector de la opinión que dudaba seriamente de que aguantaría el tirón en las tres competiciones.

Y aunque la historia terminó de forma muy distinta, los blancos, con agresividad y fútbol a partes iguales, superaron al vecino del Manzanares con contundencia en la ida. Un gol de Pepe en un tiro lejano que desvió Filipe Luis adelantó a los madridistas, que vieron como Modric les salvó en la segunda mitad del empate de cabeza de Diego Godín. Apenas un minuto después, Di María servía entre líneas un balón de oro para que Jesé Rodríguez batiera a Courtois y ampliara la diferencia. Cerca del final, el 'Fideo', con un disparo lejano que golpeó en Miranda, cerraba el definitivo 3-0.

El Calderón asistió a la sentencia por la vía rápida, con dos penaltis antes del cuarto de hora que sirvieron para que Cristiano Ronaldo marcara su doblete particular. Lamentablemente, el luso fue protagonista de dos tristes acciones. La primera, un violento golpe en el aire con Javi Manquillo, que causó un esguince cervical al canterano rojiblanco. La segunda, el mecherazo que recibió de camino a los vestuarios al acabar la primera mitad. Finalmente, los madridistas avanzaron a la final, en un partido que no pasará a la historia y que terminó de fea forma. En esta Supercopa, los rojiblancos esperan que todo cambie, y que como reza la leyenda no escrita, "final en el Bernabéu contra el Madrid, final ganada".