Siempre fue un delantero diferente. Diferente en su personalidad y en su estilo de juego. Diferente en sus formas de actuar y de pensar. Se llama Carlos Tévez y lo apodan "El Apache". La explicación: durante su infancia vivió en el peligroso barrio de Ejército de los Andes, en Buenos Aires, más conocido como “Fuerte Apache”. Una enorme quemadura, provocada por la caida de agua hirviendo cuando tenía 10 años, copa un lateral de su cara y gran parte de su cuello y pecho. Hasta en eso es diferente. En Turín, después de años dando tumbos por América y Europa, parece haber encontrado su sitio. Un sitio que ha tardado en descubrir, pero ya se sabe: más vale tarde que nunca.
Los goles de Tévez sostienen a la Juventus en ataque
La Juve traspasa porterías rivales gracias a sus goles, abundantes en su primera temporada y definitivos en su segunda. Seis tantos en los últimos cinco encuentros y todo el peso del ataque bianconero sobre sus espaldas. No le gusta huir de la responsabilidad; es más, le atrae. Lo ha demostrado desde que llegó a Turín, una fría ciudad alpina del norte de Italia, hace más de un año. Su precio, diez millones de euros, cifra ridícula en comparación con las cantidades que se manejan en el mercado actual. Para la Vecchia Signora ya está sobradamente amortizado.
A sus 30 años Carlitos Tévez vive una segunda juventud. O, dicho de otra forma, vive su época de maduración futbolística y personal. Al fin parece haber asentado la cabeza tras los grotescos, excéntricos y polémicos episodios que protagonizó durante su etapa en Manchester, espacialmente cuando vestía la camiseta del City. Ahora Tévez se centra en jugar al fútbol, que es a fin de cuentas lo que mejor sabe hacer. Las únicas salidas de tono por parte de "El Apache" en los últimos tiempos han estado relacionadas con su exclusión de la selección argentina. Exclusión, a juicio de los especialistas argentinos, injustificable.
Su promedio goleador ha mejorado desde que juega en Italia
Pero él sigue a lo suyo. La temporada pasada logró su segundo mejor ratio de goles anotados por partido en competición nacional desde que juega en Europa: 0,55 tantos, solo superado en su primera campaña como jugador del City, cuando promedió 0,65. En Europa, siempre su cuenta pendiente, ha afinado la puntería y afilado el cuchillo: dos goles en la primera jornada ante el Malmoe. Equipo menor, sí, pero una estadística alarmante le acechaba: solo tres goles marcados en sus últimos 23 encuentros en competiciones europeas. Cuenta saldada, por tanto.
Simeone deberá crear un plan especial de marcaje para Tévez. Sus seis goles en un margen de 15 días no son una cuestión menor. El Cholo es consciente de ello y actuará en consecuencia. El plan, a esta hora, aún se desconoce. Pero el peligro es real: la reivindicación de Tévez es un hecho y su momento de forma, espectacular.