Casi entre bostezos, el Atlético de Madrid afronta un nuevo envite en su caminar liguero, ese en que tiene que rayar la perfección para poder seguir en la lucha ante los fastuosos Real Madrid y Barcelona. Del primero puede separarle, a la hora de saltar al verde, una distancia de hasta siete puntos que, de no recortarse, olería a insalvable pese a no haberse agotado siquiera el mes de diciembre. Al segundo, titubeante más allá de todo lo que rodea a Leo Messi, puede darle un nuevo zarandeo para sacarle 'grogui' a Mestalla, donde quieren los dos conjuntos de la capital obligarle a torear a puerta gayola.
Pero para que el Atleti pueda disfrutar la tarde dominical viendo si su queridísimo Nuno le echa un cable, tiene primero que hacer los deberes. La tarea parece sencilla para el alumno, pero no hay padre que apriete tanto como Simeone. Ni un segundo de respiro permitirá el argentino. Y no de cara a la galería, sino por plena convicción. Y es que el 'Cholo' no va a ver enfrente a un rival débil, en descenso, con poco tino en ataque y malos mecanismos en defensa. Para él, que primero mira a los suyos, solo existe un panorama sin Miranda, sin Gabi y con Tiago entre algodones.
La ausencia de Gabi y las molestias de Tiago preocupan seriamente a Simeone
Desde el mismo lunes viene entrenando el bonaerense la manera de cubrir las ausencias correctamente. Atrás Giménez seguirá por el brasileño, pues aunque su rendimiento no está siendo óptimo con Godín al lado la vida es mucho más fácil. En la medular Mario, en una relación amor-odio con el entrenador, con la grada y casi hasta consigo mismo, tendrá que volver a poner el ancla. Del estado físico de Tiago, que no está al 100%, dependerá no solo su pareja de baile sino la composición del resto del equipo. De no estar disponible el luso, Koke retrasará su sitio a la sala de máquinas dejando un costado disponible o para Saúl, en el ostracismo tras un comienzo de temporada con minutos, o para Raúl García, que devuelve el puesto de segundo delantero este fin de semana a Griezmann, cada día que pasa menos principito y más rey, estilismos más o menos acertados aparte.
El resto del bloque será el mismo que arrasó con el Olympiacos el miércoles. Hay Copa del Rey entre semana, momento para que descansen los impecables Juanfran y Arda Turan, cuyo concurso en Liga es imprescindible. Se le exige rotar desde algunos frentes a Simeone, esos mismos que también le exigirán que vuelva a pelear por la Liga. En misa y repicando ya lo dice el refranero: no se puede.
Un muro para aguantar
Los colchoneros, que tienen que tirar de hemeroteca para recordar la última vez que cayeron en el fortín en que han convertido a su Vicente Calderón, tendrán delante a un Depor que va cogiendo, tras el cambio de planes de Víctor Fernández, consistencia rocosa. El entrenador visitante, desesperado con una plantilla con el nivel justito y el compromiso por los suelos, consecuencia de tener que hacer encaje de bolillos con los pocos euros disponibles, apostó la semana pasada ante la Real Sociedad por una defensa de cinco. Empate a nada, punto al zurrón y a capear el temporal hasta que vuelvan los encuentros de 'su liga'.
Este domingo, con 'visita al dentista' como popularizó Caparrós más que asumida, el veterano entrenador parece conformarse a tenor de lo visto durante la semana con el punto, que a buen seguro firmaría antes del pitido inicial. Falta Lopo, capital en la zaga coruñesa y objetivo de fichaje del FC Barcelona según Sport por raro que parezca, pero parece que se mantendrá la defensa súperpoblada de hace siete días. Mata así dos pájaros de un tiro sumando centímetros ante el previsible acoso aéreo local a balón parado, si bien muestra sus intenciones.
A falta de determinarse quiénes serán los ocupantes de esas cinco plazas, las dudas surgen más bien en la parte más adelantada. Postiga, todo nombre y nada rendimiento hasta la fecha, es centro de las críticas de la afición, hasta tal punto que se reclama la presencia de hombres como el exatlético Toché en el once inicial. De todos modos parece que la misión de quienes actúen será casi idéntica a la de los defensas: parapetarse atrás, aburrir al Atleti y, si pueden, contragolpear; sin que importe mucho no lograr este propósito si su propia meta queda a cero.
Consciente Víctor de que en el campo las opciones de los suyos son muy pocas, menos aún con su planteamiento reservón, ha intentado ganar puntos durante la semana ante los micrófonos. "El Atlético está rozando el reglamento siempre", declaró en rueda de prensa. Quizás el ejemplo de su compadre en Valencia Nuno le marcase la línea a seguir, aunque el discurso parece ya demasiado manido.
Pavor local al silbato
Puede que Víctor haya tratado de realzar este supuesto juego sucio atlético tras conocer la designación arbitral. Si el pasado fin de semana fue el mayor de los Teixeira Vitienes quien viajó al Calderón, y sorprendentemente echó una mano a los locales, esta vez será el turno del hermano pequeño. Solo escuchar sus apellidos provoca terror en la hinchada rojiblanca, que nunca ha visto a los suyos ganar en las dos visitas previas del cántabro a la capital. Infausto recuerdo el de estos hermanos que deberá ser sepultado por un Vicente Calderón en el que la victoria es ya forma de vida.
Convocatorias y posibles onces
Atlético de Madrid: Moyá, Oblak; Juanfran, Jesús Gámez, Godín, Giménez, Ansaldi; Mario Suárez, Tiago, Koke, Saúl; Arda Turan, Cerci, Cristian Rodríguez, Raúl García; Griezmann, Raúl Jiménez y Mandzukic. Ausencias: Miranda (lesión), Gabi (sanción) y Siqueira (decisión técnica).
Deportivo de La Coruña: Fabricio, Lux; Manuel Pablo, Laure, Insua, Diakite, Sidnei, Canella, Luisinho; Juanfran, Bergantiños, José Rodríguez, Medunjanin, Juan Domínguez, Wilk; Cuenca, Postiga y Toché.
