El Atlético de Madrid guarda un nuevo as en la manga. Y no, no son los goles a balón parado, los cuales ya se han convertido en una herramienta habitual futbolística de los guerreros del Cholo. Se trata de la franja horaria en la que los del Manzanares anotan sus goles.

Los colchoneros se han aficionado a los goles psicológicos, aquellos que dejan KO a los rivales, sin tiempo de reacción. En estas primeras trece jornadas de la Liga BBVA, el Atleti ha conseguido anotar hasta 8 goles en la franja horaria que va desde pasada la media hora de juego hasta el final de la primera mitad.

En este inicio de temporada los equipos que se enfrentan al Atlético de Madrid se encuentran cada vez más cerrados, obligando a los rojiblancos a que se esfuercen al máximo para poder anotar sus goles, sobre todo en la primera mitad. Tanto es así que de los veinticinco goles que los atléticos han anotado en estas primeras trece jornadas de competición liguera, ocho han llegado durante los últimos minutos de la primera mitad. Son los llamados goles psicológicos, aquellos que llegan al filo del descanso y que suponen un golpe moral para el rival, que acariciaba la segunda mitad partiendo con tablas y se encuentro con que va por detrás en el luminoso.

Psicología para ganar

A las paradas de Moyá y las galopadas de Juanfran y Siqueira o Ansaldi, a la solidez de Godín y Miranda, al temple de Koke y las galopadas de Arda, a la seguridad de Gabi y Tiago, a los goles de Griezmann y Mandzukic... a todo el colectivo del Atlético de Madrid se les une a hora la importancia del cuándo marcar los goles.

El intervalo horario que va desde el minuto 31 hasta el 45 se ha convertido en un nuevo peligro para los rivales que se enfrenten a Simeone y sus pupilos, sobre todo para aquellos que viajan hasta el Calderón.

Y es que, de esos ocho goles psicológicos que el Atlético ha conseguido anotar en los últimos minutos de la primera mitad, siete de ellos han sido firmados en el Vicente Calderón y solo uno fuera de casa. Ese único tanto fue anotado por Mandzukic, en el Coliseum Alfonso Pérez. Era el minuto 40 y sirvió a los rojiblancos para marcharse de Getafe con los tres puntos.

Por su parte, el Atlético tiene bien cubiertas las espaldas en su franja horaria predilecta para marcar. Solo ha recibido un gol en esos últimos quince minutos de la primera mitad. Fue en casa, ante el Éibar, en la jornada número dos de esta temporada. Tras anotar Miranda y Mandzukic antes de que se cumpliese la primera media hora del encuentro, Abraham acortó distancias en el minuto 33, poniendo el 2-1 final en el marcador.

En total, el Atlético de Madrid ha sido capaz de mojar en 16 ocasiones durante la primera parte de sus duelos ligueros, mientras que los nueve goles restantes han llegado ya en los siguientes cuarenta y cinco minutos. 

El sábado, a las 16:00 horas, el Atlético de Madrid tiene una nueva oportunidad de marcar uno de estos goles psicológicos en los que se ha doctorado. Será en el Estadio Martínez Valero, ante el Elche. Fuera de casa, donde solo ha anotado uno de estos tantos morales y donde querrá seguir sumando puntos.