Desde hace ya bastantes años hay en la ribera del Manzanares un jugador que nunca falla, un jugador que se deja el aliento hasta el último minuto, un jugador que nunca pierde la ilusión, un jugador que pasen los años que pasen seguirá dándolo todo por un escudo, un jugador que marca siempre el primer gol cuando el rival salta al campo, un jugador que lucha en cada encuentro por ver a su equipo en lo más alto, un jugador que aunque haya que escalar, aunque caigan chaparrones se mantiene firme dando ánimo al resto de compañeros, ese jugador luce el número 12, es la afición del Atlético de Madrid que se encarga de convertir el Estadio Vicente Calderón en una de las catedrales del fútbol europeo, una auténtica olla a presión que le ponen las cosas muy complicadas a los equipos visitantes, y más si el partido apunta a grandeza, como es el caso del duelo de mañana entre los rojiblancos y los azulgranas, donde los pupilos del Cholo lucharán para remontar un 1-0 del Camp Nou.
No hay que viajar muy atrás para imaginar como será el ambiente en el partido de mañana. El año pasado los del Manzanares ya se vieron las caras con los de Barcelona, en una eliminatoria muy parecida a esta, también en cuartos de final. La única diferencia fue que la competición no era la Copa del Rey sino la Champions League y que el resultado en el Camp Nou fue un 1 a 1, lo que daba un plus a los indios.Sin embargo en esta ocasión son los azulgranas los que cuentan con ventaja, después de encajar en su casa una victoria por 1 a 0. Una diferencia no muy grande que obliga a los del Cholo a marcar dos goles para superar la elimintoria, no obstante, no es una gran remontada.
El Atlético debe encarar la eliminatoria de una manera parecida a como lo hizo el año pasado en los cuartos de la Liga de Campeones. Cuando el empuje de la grada fue tal que al poco de comenzar el equipo madrileño ya iba ganando por 1 a 0. Un gol de Koke en el minuto 5', tras un gran arranque de partido de los rojiblancos, valió a los pupilos del Cholo para pasar de fase. Ese día será recordado por todos los colchoneros como el que más rugió el Calderón en una temporada inmejorable.
No hay quién pare a un Calderón lleno
En cuatro ocasiones en esta temporoada se ha llenado el Estadio Vicente Calderón y en las cuatro el encuentro se ha saldado con una victoria para los locales. El primer gran partido "con entradas agotadas" fue en la Supercopa de España, en agosto, cuando el Atlético de Madrid se enfrentó a su vecino y eterno rival, el Real Madrid. Los colchoneros conquistaron el título. El segundo se vivió "el día de las peñas" ante el Sevilla, partido que se saldó con una goleada rojiblanca por 4 a 0, el Calderón se convirtió en una auténtica fiesta tanto para pequeños como para mayores.
Este ambiente se repitió frente a la Juventus en Liga de Campeones, donde los de Madrid sumaron una victoria muy importante por 0 a 1 que sería clave para superar la fase de grupos. La cuarta vez que se ha respirado este ambiente, donde apenas "cabía un alfiler" en el Estadio Vicente Calderón fue ante el Espanyol el pasado 19 de Octubre, una vez más la victoria fue para los locales por 2 a 0.
Miles de aficionados atléticos lucharán por la remontada
A una semana para el partido, el Atlético de Madrid ya había vendido la mitad de las entradas puestas a la venta. A escasas horas del encuentro están casi todas vendidas y se espera para mañana un lleno total. Nadie quiere perderse el choque, y es que la hinchada rojiblanca será muy determinante en el duelo de mañana. Todas las partes del campo cantarán al unísono en comunión, tanto fondo sur, como fondo norte, como lateral, como preferencia, serán una sóla voz que intentará llevar en volandas a los del Cholo.
Desde que el árbito pitó el final del partido en el Camp Nou en toda cabeza rojiblanca prevalece una idea "luchar hasta la muerte" como bien dijo Simeone: "Se que van a jugar bien, es vencer o morir. Y los míos no le tienen miedo a la muerte. Es algo que posiblemente los demás no tienen".
Para el Atlético de Madrid será muy difícil, no es fácil ganarle a un equipo tan fuerte como el Fútbol Club Barcelona, con jugadores del nivel de Messi, Neymar o Luis Suárez. Pero si hay un pensamiento que se ha encargado de implantar en este equipo el de Buenos Aires es que los imposibles no existen y que se debe luchar cada minuto y cada balón sobre el terreno de juego. Así lo relató la gran fiera francesa del Atlético de Madrid tras la victoria conseguida el pasado sábado frente al Rayo Vallecano en la Liga BBVA: "Si no estuviéramos convencidos de pasar frente al Barcelona no jugaríamos".
Los indios ya han demostrado en varias ocasiones que los grandes retos no les asustan, que si pierden lo harán con la cabeza bien alta, felicitarán al contrario y se levantarán pensando en la próxima final. Pero nadie podrá decirle a un rojiblanco que no lucharon por la remontada.