Y Keylor bajó al Calderón

Atlético y Real Madrid empataron en un duelo con final frenético. Benzema adelantó a los blancos al principio del partido y Vietto, en el tramo final, hizo la igualada. Keylor Navas paró un penalti y sacó una mano determinante en el descuento para mantener la igualada.

Y Keylor bajó al Calderón
Keylor fue el héroe del Madrid en el Calderón | Foto: Rodri J. Torrellas - VAVEL
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Por Juan Ignacio Lechuga

Parecía un duelo de otros tiempos. El Madrid marcaba rápido, el Atleti fallaba un penalti y los cambios no hacían reaccionar al equipo para conseguir una remontada que, conforme pasaba el tiempo, parecía menos posible. Pero en el Calderón todo puede pasar. Keylor Navas detuvo la reacción rojiblanca parando primero un penalti y, después de que Vietto igualara, sacando una mano prodigiosa a un disparo de Jackson, que podría haber encontrado en en el añadido su gol de consagración.

Benzema define, Keylor aguanta

Con Simeone y Benítez en los banquillos, se podría presumir un duelo muy táctico. Nada más lejos, el partido comenzó con ritmo y ocasiones para los dos equipos. Cristiano fue el primero en avisar con un cabezazo, Correa respondió tras una gran frontal y Benzema, en la tercera ocasión del partido, no perdonó. Carvajal se deshizo de Filipe como si este fuera un crío, centró al corazón del área y allí cabeceó el francés, entre los dos centrales. Como en los viejos tiempos, el Madrid golpeó nada más comenzar.

A contracorriente, el Atlético no se asustó. Correa, que jugaba arriba con Torres y desplazaba a Griezmann a la banda, fue el más activo del ataque rojiblanco. De sus botas salió una nueva ocasión, con una gran pared en la frontal que acabó con un disparo rozando el palo. El argentino fue la electricidad de un Atleti que estuvo algo impreciso, con Gabi perdiendo más balones de la cuenta, Torres desafortunado y Griezmann, en la banda, demasiado lejos del área.

Se adueña por momentos el equipo de Simeone del balón, pero no apareció en esa faceta Óliver, de nuevo desaparecido. En una buena presión de la delantera local, llegó una de las ocasiones claves del partido. Griezmann robó el balón y se la dio a Torres con espacio, que no llegó a disparar. En el área volvió a aparecer de nuevo el francés, que provocó el penalti y la amarilla a Ramos. Fue el propio Griezmann el encargado de lanzar la pena máxima... y fallarla. Keylor se lanzó a su izquierda, adivinó y paró. El portero costaricense sigue manteniendo un muro en su portería en este incio de temporada.

El Madrid mantenía el balón cada vez que lo poseía, con ataques largos que casi siempre acababa finalizando en el área contraria y con Modric a los mandos del juego. Tras el penalti fallado, el Atleti decayó en ánimos y el duelo se volvió a igualar en posesión, haciendo hincapié el equipo de Benítez en mover el balón de un lado a otro y matando así, lentamente, las esperanzas rojiblancas.

Reacción tardía

En vistas de lo sucedido, Simeone movió fichas al descanso. Dio entrada a Carrasco en lugar de Óliver y el partido, en su reinicio, se rompió. El Madrid encontraba muchos espacios al contragolpe, pero Cristiano no conseguía estar atinado en los metros finales, donde más letal suele ser. En el conjunto rojiblanco, Correa seguía en esta de gracia. Todo lo que pasaba para beneficio atlético salía de sus pies y sus movimientos. Hasta que Simeone lo cambió por Vietto, para sorpresa de la parroquia del Calderón.

La idea de Benítez era clara: intentar aprovechar los contragolpes o, si no, dormir el partido con el dominio del balón para desgastar a un Atlético que se apagaba conforme pasaban los minutos. Los cambios del 'Cholo' no parecían dar resultados y por momentos las sensaciones estaban más cerca de la sentencia blanca que del empate.

Volvió a mover a sus hombres el técnico argentino en su última bala: emparejó a Carrasco en la izquierda con Arbeloa y puso a Griezmann arriba junto a Jackson, que sustituyó a Torres. Y el equipo se vino arriba en el tramo final, cuando todo parecía perdido. Carrasco demostró el por qué de su fichaje y propició un cabezazo de Vietto que se marchó pegado al palo. Fue el aviso del empate, que llegó dos minutos después; otra buena jugada del belga tras la que Jackson llegó a línea de fondo, puso el balón al área y Griezmann intentó una 'frivolité'. Su taconazo no salió, pero Vietto llegó para empatar el partido y elevar los ánimos de una grada que apretó como mejor sabe.

Y la remontada podría haber llegado en la prolongación, cuando Jackson controló en el área, sacó un derechazo y, cuando la afición empezaba a levantarse de su asiento, Keylor sacó una mano prodigiosa para sentenciar el reparto de puntos. El punto será el mismo para los conjuntos, pero en ánimo, sin duda, salió victorioso el Atlético.