Volvió a vencer. Pero sigue sin convencer. Una noche más, el Betis se impuso con más pena que gloria a su rival. Y es que las victorias béticas no acostumbran esta temporada a ser excesivamente brillantes. Ante un Mallorca que mereció más en el Villamarín, Rennella se encargó de desequilibrar la balanza en un día que tuvo como protagonista absoluto a Rubén Castro. Suya fue la jugada previa al gol del francés. Además, fue homenajeado en la previa por haberse convertirse en el máximo goleador histórico del Real Betis.
Durante el homenaje, jugadores y cuerpo técnico presenciar un vídeo donde se vieron algunos de los goles más importantes de Rubén Castro en el videomarcador del estadio. Además, una pancarta en la grada baja de Fondo en su honor.
Tras el homenaje, comenzó un partido más para el Betis. Como tantos otros. Sin brillo, sin buen juego, sin contagiar a su gente. Pero en este caso, con una necesitada victoria.
Sin dueño, la primera parte estuvo llena de balonazos de la defensa a la delantera, sin que existiera el centro del campo verdiblanco. Un cruce providencial de Jordi Figueras para evitar el primero del Mallorca fue lo más destacado de los 45' minutos iniciales.
Tras el paso por vestuarios, el Betis pareció salir más enchufado al partido, adelantando las líneas y mostrando su clara intención de ir a por el encuentro.
Y el gol no tardó en llegar. Fue de Rennella, pero el protagonismo, una vez más, se lo llevó Rubén Castro. El canario recogió un balón fuera del área, encaró, se adentró y disparó. Su tiro lo repelió Cabrero, y allí llegó Rennella para hacer el 1-0 para el Betis.
Lejos de ir a por el segundo, el Betis retrasó líneas tras la ventaja en el marcador. Karpin se fue a por el partido metiendo más atacantes, y Asensio fue la baza ofensiva por donde pasaron todos los balones del conjuto bermellón, que hizo sufrir a los verdiblancos pero no consiguió encontrarse con la igualada.
En sala de prensa, Karpin se mostró muy descontento por el resultado: "Es increíble que hayamos perdido este partido".
Por su parte, Merino destacó que "el fútbol son resultados", sin querer destacar el mal juego de su equipo.
