El Betis llegaba al Stade de la Monsson con siete encuentros disputados y ni una sola derrota a sus espaldas. El aliciente de mantenerse invicto y de llegar al último tramo de la pretemporada con esa certeza era una de las claves de este sábado de fútbol en Francia. 

El Montpellier y el Betis salieron tímidamente al campo sin un dominador claro en los primeros minutos, con un juego sin ritmo y sin claras ocasiones de gol. Un córner a favor de los verdiblancos y un centro de Joaquín al que no llegó ni Sanabria ni Álex Martínez fue lo único atractivo en los primeros seis minutos de juego. Distintas eran las intenciones del conjunto galo que buscaba la velocidad en contragolpes incisivos que hacían algo más de daño a una zaga bética algo desorganizada. 

La lesión de Sanabria, primer punto de inflexión

En el minuto 16 Sanabria recibía un golpe que le hacía retirarse del verde con molestias en su hombro derecho. Los de Poyet jugaban con diez y un Joaquín muy activo en aquellos minutos nos recordaba al Joaquín desequilibrante de otra época con buenas actuaciones desde su banda, desde la que trataba conectar con Álex Alegría que se había quedado sin su acompañante de la tarde desde la retirada del ex el Sporting de Gijón. 

Pasaron los minutos hasta el 24 donde se confirmaba la lesión de Sanabria, que decidía retirarse por las molestias en su hombro, y en su lugar saltaba al terreno de juego Zozulya. El parón por la lesión del dolorido Sanabria sirvió para que los futbolistas parasen a refrescarse y para que ambos técnicos de sus respectivos equipos dieran nuevas órdenes tácticas a sus jugadores. 

La lesión de Sanabria hacía saltar las alarmas a los aficionados béticos y al staff técnico, aunque a falta de la confirmación oficial, parece que no es nada grave y que la retirada del campo del delantero paraguayo fue más bien preventiva al tratarse de un amistoso de verano donde no había puntos en juego. 

La inclusión de otro de los recientes fichajes del Real Betis, el ucraniano Zozulya, obligaba a Gustavo Poyet a variar tácticamente el equipo, trasladando a Joaquín a la banda izquierda y el mencionado Zozulya, a la derecha. Los minutos restantes fueron de algo más de control para el Montpellier, quienes tuvieron las mejores ocasiones a excepción de una buena conexión entre Alegría y Felipe Gutiérrez que sí inquietó a la defensa del equipo francés.

Así llegaríamos al descanso con la lesión de Sanabria, el descaro de Zozulya y Joaquín, pero con un Montpellier más inquietante. 

Con el segundo tiempo, el Betis mostró aún más sus debilidades

Llegarían los primeros cambios para el Montpellier durante los quince minutos de parón. Al reanudarse el segundo tiempo, el asedio galo fue mayor ante un Betis incapaz de salir bien con el balón jugado. Jonas Martin, que volvía a la que fue su casa durante 12 años, trató de crear peligro con una veloz galopada en la que finalmente no consiguió inquietar la portería contraria. Tres minutos más tarde, una mano infantil de Rafa Navarro condenaba a los Poyet a los once metros, desde los que Boudebouz no falló y puso el primer tanto en el marcador: 1-0.

Tras el gol del Montpellier, se produjo una tangana en la banda que se saldó con la expulsión de Marcos Álvarez, preparador físico del Betis y con la cartulina amarilla para Ellyes Skhiri. El árbitro francés del encuentro no supo poner orden y ambos banquillos se enfrentaron en la banda incluso después de reanudar el juego. Tras la riña, el Betis decidió mover ficha y Poyet realizó sus primeros cambios dando entrada a Ceballos y José Carlos.

El partido se quedó algo frío tras la tangana y tras varios minutos con más cartulinas que fútbol, el Montpellier colocaba el segundo tanto en su casillero a obra de Saihi con un espectacular derechazo ante el que no puede hacer nada Adán.

La mala imagen de los de Poyet se evidenciaría aún más con el tercer y definitivo tanto marcado por el conjunto galo tan solo dos minutos después de hacer el segundo. Mounié batía a un desafortunado Adán con un disparo desde la frontal del área que, tras tocar en la mano del ex madridista, acaba entrando en la portería. De aquí al final solo pudimos ver a un Betis que no sabía encajar la derrota, sobre todo en la figura de Jonas Martin, que sin duda se habría esperado otro escenario en el encuentro contra su ex equipo. 

Ceballos maquilló con un lanzamiento al palo la actuación paupérrima de los de Poyet que dejan por primera vez en toda la pretemporada algo de dudas respecto al rendimiento del equipo para la nueva temporada que está a punto de comenzar.