"En un derbi, en un partido como éste, ganar es un gran espaldarazo, un refuerzo anímico para el equipo", comentó Eduardo Berizzo, que mostró una "enorme satisfacción" tras en la rueda de prensa posterior al encuentro en el que sus pupilos lograron vencer por la mínima al eterno rival.
Al técnico no se le escapó la épica de lo que ocurrió con el penalti detenido por Sergio en los instantes finales: "El penalti le otorgó un dramatismo especial pero lo importante es que hemos ganado. La gente quería ganar, nosotros queríamos ganar, y lo conseguimos".
Partido de dos fases
Sin embargo no todo fueron satisfacciones para el argentino, Berizzo analizó el encuentro y encontró debes en el futuro inmediato de los suyos: "Estábamos más apresurados de lo que la circulación necesitaba. No hemos podido jugar como habitualmente lo hacemos, producto de una ansiedad que tiene que ver con la importancia del partido, o con el derbi en si mismo. No circulamos la pelota como solemos hacer, estábamos apurados por terminar la jugada y elegimos mal. En el primer tiempo tuvimos el control total del partido y ahí pudimos marcar diferencias, en el segundo la cosa se empezó a luchar más que a jugar, el juego se rompió, había contras. No debimos recibir el 1-1 porque no pasaba nada en el partido", y no dudó en añadir: "Nos replegamos demasiado en los últimos minutos porque el Dépor con balones en largo nos hizo daño. Tuvimos la contra de Larrivey para matar el partido, fallamos y después vino el penalti. Afortunadamente Sergio lo paró; pero me quedo con el trabajo de todo el equipo. Este triunfo es de los jugadores".
Sergio, protagonista
El técnico reconoció la importancia que está teniendo el meta en la consecución de los últimos puntos del equipo vigués: "Sergio nos ha dado el partido pasado con sus intervenciones, nos lo ha dado hoy… pero además la gente en defensa y el equipo han estado muy compenetrados".
"Dueños de Galicia"
El técnico finalizó la rueda de prensa agradeciendo el esfuerzo a los aficionados y dedicando a estos el triunfo: "Me llena de satisfacción poder encontrar a mi gente, al celtismo, celebrando esta victoria porque sé cómo se disfruta y lo que importa ganar el derbi. Hoy podemos decir que somos los dueños de Galicia".