Théo Bongonda (Charleroi, 20 de noviembre de 1995) llegó al Celta hace un año, en los primeros días de apertura del mercado invernal con el objetivo de reforzar el gol celeste, prácticamente desaparecido desde que el Celta asaltase el Camp Nou en noviembre del año anterior. Con 19 años recién cumplidos, Bongonda llegó a Vigo procedente del SV Zulte Waregem de la Jupiter League, a cambio de 1,3 millones de euros. Su fichaje sorprendió a propios y extraños. Definido como un jugador “técnico, rápido y habilidoso con el balón en los pies”, su llegada se vio como una inversión a largo plazo, y su rendimiento ha crecido exponencialmente a medida que se adaptado al equipo.

En su primera temporada defendiendo la elástica celeste, el joven belga disputó un total de 132 minutos, repartidos en ocho encuentros de Liga, ninguno de ellos como titular. Su debut se produjo en Copa del Rey, en el nuevo San Mamés, con un amargo final para los olívicos, que se llevaron el partido a la vez que decían adiós a la competición del KO. En Donostia llegó su primera asistencia, corría el minuto 89 y el belga filtró un buen pase a la frontal del área para que Nolito pusiese el a la postre definitivo empate a un gol. Su primer tanto, en la jornada 30, en la visita del Celta a Los Cármenes. Por detrás en el marcador desde los primeros minutos, el Celta se complicó absurdamente un encuentro que en condiciones normales debería haberse llevado con facilidad. No obstante, la figura del belga apareció en los últimos instantes del choque, cazando un balón suelto en el área rival y batiendo a Roberto para poner el definitivo empate.

En sus primeros meses como celeste, Bongonda contó con pocas oportunidades. 132 minutos en ocho partidos disputados

En su primera campaña en Vigo, el joven delantero apenas contó con oportunidades para demostrar su valía. El extraordinario rendimiento de Nolito y Orellana —habituales en las posiciones del belga— y la explosión del canterano Santi Mina impidieron al de Charleroi disputar de los minutos necesarios, aunque cumplió siempre que Berizzo solicitó su presencia. Sin intención de acaparar balón o de exhibirse, el belga aprovechó los pocos minutos de los que dispuso.

Inicio con fuerza

La presente temporada ha sido como una montaña rusa para el joven extremo. La salida de Santi Mina rumbo al Valencia —previo pago de los diez millones de euros de su cláusula de rescisión— situó a Bongonda como el principal sustituto tanto de Orellana como de Nolito. Su gran pretemporada dejó muestras de lo que es capaz de hacer, pero el inicio de competición no fue el deseado a nivel personal. Su debut en Liga se produjo en el enfrentamiento ante Las Palmas, en la jornada 3, y su primera titularidad llegó en la visita del Celta a Eibar, por una fiebre que impidió a Guidetti formar parte del once de partida. Así, hasta finales de noviembre, Bongonda tan solo acumulaba 101 minutos disputados, disparándose la rumorología sobre una posible cesión, negada por el mismo futbolista. “Soy joven, tomo ejemplo y trabajo todos los días”, aseguró. 

No obstante, su situación cambió en el mes de noviembre, cuando Berizzo le concedió la titularidad en tres partidos de Liga consecutivos: en la victoria del Celta al Sporting en Balaídos (2-1), en el empate en el Benito Villamarín, donde fue el autor de único tanto celeste (1-1) y en la victoria ante el Espanyol (1-0), aunque en ninguno de ellos jugó los 90 minutos. No obstante, en los últimos instantes del choque ante el los pericos, Nolito sufrió una lesión muscular, que lo ha mantenido en el dique seco hasta febrero, y que ha cambiado el papel de Théo en el Celta. El primer compromiso liguero sin el de Sanlúcar señalaba una visita al Granada, lugar que sin duda le trae buenos recuerdos: primer gol en la 14/15, primer partido completo disputado con el Celta y victoria por cero goles a dos. En la ya tradicional derrota celeste en la visita del Athletic a Balaídos (0-1), el belga disputó 87 minutos, y fue suplente en la visita al Málaga en La Rosaleda, donde los de Berizzo cayeron en un mal partido por dos goles a cero. Desde entonces, Bongonda ha sido titular en los cuatro jornadas que el Celta ha disputado en Liga. En la derrota ante el Atlético (0-2), en la victoria ante el Levante (4-3) y en las derrotas ante Rayo y Las Palmas —3-0 y 2-1 respectivamente—, compromisos en los que el belga disputó los noventa minutos. A su vez, el joven extremo belga fue el autor de único gol celeste en el estadio de Gran Canaria, con un gran gol en el que aprovechó su velocidad para adelantar a los olívicos, aunque a la postre un gol de William José en el último minuto supuso una cruel derrota para los del Toto.

Situación complicada

No obstante, el futuro de Bongonda en la presente temporada no está del todo claro. La adaptación de Guidetti y sus goles han hecho que el belga no haya disputado ni un solo minuto en la eliminatoria ante el Atlético, y tampoco ha dispuesto de oportunidades en la ida de las semifinales ante el Sevilla. La incursión del internacional sueco en el once del Toto ha desplazado a Iago Aspas a la banda derecha, y a Orellana al lugar que estaba ocupando Théo, el extremo izquierdo. A su vez, el importante desembolso en el fichaje de Beauvue —que puede jugar en las tres posiciones de ataque— le puede cerrar las puertas tanto de la titularidad como de la rotación. No obstante, el principal problema de Bongonda se llama Nolito. Y es que una vez confirmado que el el '10' continuará en Vigo, el celtismo cuenta los días para ver de nuevo al de Sanlúcar defender la zamarra celeste, un hecho que sin duda no incrementa las posibilidades de jugar del extremo belga. 

Así, el futuro de Bongonda se encuentra en una encrucijada. De la titularidad a los banquillos, a pesar de su buen papel. Nolito, Guidetti y Beauvue, su competencia. Del trabajo y paciencia de Théo dependerán sus posibilidades de volver a jugar con regularidad, sino, al Celta le crecerán los enanos con un nuevo 'caso Drazic'.