Comienzan los primeros rayos de sol y con ello las grandes citas clásicas deportivas. A las ya sabidas Eurocopa, Copa América y Juegos Olímpicos, también han empezado las grandes vueltas ciclistas, con el Giro de Italia. Ya sea un gran apasionado de la bici o bien el Tour francés es una buena excusa para una siesta en el sofá, las etapas de montaña están en la sobremesa de la tarde cada día, pero también los sprints, donde especialistas dan el 100% en una explosión física en apenas pocos segundos. En el fútbol, como en el ciclismo, una vez llegado a la etapa final, los equipos se ponen el traje de faena y comienzan a pedalear cara a sus objetivos. Algunos se consiguen y otros no, pero no puede quedar la duda en el aire de que los jugadores se han dejado la piel por el escudo que porta su camiseta.
Algunos, como el Málaga, ha llegado ya a su objetivo pero su visita a Vigo no será un paseo de domingo mirando el paisaje, con un ritmo lento. Los de Javi Gracia no quieren regalar ni un solo punto en las dos jornadas restantes y acelerarán cara a la victoria. Un solo punto le sería suficiente al Celta para asegurar la sexta plaza y librarse de previas europeas la próxima temporada, pero Berizzo y sus jugadores no quieren caer en la relajación y lucharán por esa quinta plaza con el Athletic de Bilbao.
Vigo será una fiesta
Y Balaídos su escenario, gane o pierda el equipo ante el Málaga. En su último partido, el Celta se despedirá ante su afición a lo grande, con múltiples celebraciones para disfrutar de la vuelta a Europa diez años después. Quien no podrá celebrarlo en el campo es Gustavo Cabral, sancionado con dos partidos tras su pique con Aduriz que a la postre le costó la expulsión y castigo por parte de la Federación de arbitraje. Por tanto, Eduardo Berizzo volverá a encajar piezas en la defensa, con Hugo Mallo como posible candidato y la entrada en el once de Carles Planas.
Arriba, no hay dudas. Los buenos deben jugar y tanto Iago Aspas como Nolito y Orellana estarán en el once inicial. Destaca también la presencia de Tucu Hernández, que vuelve a su mejor versión y algunos aficionados celestes ya se preguntan por qué no le suben su cláusula de rescisión, pues 3 millones pueden ser muy tentadores a pagar por clubs interesados en su contratación en su mejor año como celeste. A la espera de no jugarse la habas contra el Atlético de Madrid en el Calderón, en el partido ante el Málaga deberán salir a por los tres puntos y así cerrar un año en Balaídos espléndido. Y luego a celebrarlo con la afición.
A Vigo con la defensa en cuadro
Problemas para Javi Gracia en un partido contra el Celta en el cual, además de los tres puntos, está el orgullo del ganador, y por tanto no saldrá a regalar el partido. Javi Gracia aseguró en rueda de prensa que quiere los seis puntos que restan en liga y así poder quedar octavos, puesto más que meritorio para este Málaga C.F. No podrá contar los malagueños con bajas sensibles en defensa, con las ausencias de Albentosa por acumulación de tarjetas y Rosales por lesión, pero vuelve a la convocatoria Weligton, que apunta a la titularidad.
Será un día muy especial para el delantero centro Charles, que el año pasado defendía la camiseta celeste y ahora, ya en las filas del Málaga, ha explotado como goleador con la confianza de Javi Gracia que el año pasado no contaba a las órdenes del Toto Berizzo. Pero el delantero brasileño dejará los sentimientos a un lado para poder batir de nuevo la portería del Celta de Vigo como ya ha hecho esta temporada en la primera vuelta, cerrando un 2 a 0 en el marcador en una victoria muy trabajada para el Málaga.
