A Martino le gusta asumir riesgos. Y el problema defensivo capital del FC Barcelona, más allá de su forma de atacar y proteger la posible perdida, sigue siendo el mismo: la espalda de los interiores. Ante este hándicap, han aparecido siempre dos soluciones: la anticipación y ocupación de espacios de Busquets, con una lectura táctica del juego única en el césped, y la altura del robo que ejercen los dos centrales al salir de su zona.
Con Piqué, central más posicional, de salida de balón y seguridad con él, no muy habituado a saltar al poseedor o salir de su zona natural de juego, el Barça sufrió para recuperar cuando los pases del rival superaban la línea de medios y Busquets no lograba llegar. El desajuste, evidente, se convertía aún más grave cuando Alves o Alba desprotegían su espalda y los carriles exteriores eran ocupados por los oponentes generando una evidente superioridad.
Bartra suele rectificar por velocidad
Sin embargo, parece que Mascherano y Bartra se sienten más cómodos defendiendo lejos del área propia que dentro de la misma, donde sí prestan carencias. Ante el Betis, el gran ejemplo fueron los primeros minutos donde Marc se atrevía una y otra vez a adelantar metros su zona principal de influencia. La mala medida de sus salidas era muchas veces corregida por su velocidad, cintura y anticipación. El gol de Rubén Castro dejó en evidencia a ambos, sufriendo cuando tienen metros por detrás y las ayudas no llegan. Algo que, con Piqué o sin él, arrastra el equipo culé toda la temporada.
Ante el Atlético de Madrid volverá a ser esencial la altura de terreno a la que jueguen Alba y Alves. La cobertura y escalonamiento defensivo para anticipar cada contraataque y juego directo de los de Simeone, dominando este registro a la perfección, será clave para ver hasta qué punto son favorables las opciones defensivas de ambos centrales.
Detrás, Pinto, portero que no ofrece tantas garantías y seguridad como Valdés cada vez que tiene el balón. El espacio ocupado por Adrián, Arda Turan o Cebolla Rodríguez, enlazado siempre desde los desplazamientos de Koke, peligro más grande del actual líder de la Liga BBVA. Proteger la pérdida e intentar