Algo más de tres décadas han pasado desde que Carles Rexach anunciara su retirada como futbolista en activo. Fue en 1981 y, hasta la fecha, representa el último jugador en desarrollar íntegramente su carrera deportiva en el FC Barcelona. Rexach logró mantenerse en el mismo club tras incorporarse en él a los 12 años, y nunca salió de allí. Además de los 449 partidos disputados con la camiseta del Barça, que le convierten en el sexto jugador azulgrana con más partidos en el club, ostenta el récord de haber mantenido la relación contractual más larga con el club azulgrana, de 44 años: cinco como canterano, 17 en el primer equipo y 22 como miembro del cuerpo técnico.
Tres décadas desde Rexach a Puyol
Rexach pertenece a una estirpe de jugadores, culés de por vida, que son una especie casi extinta en las últimas décadas en el barcelonismo. En estas últimas tres décadas, prácticamente ninguno de los futbolistas nacidos futbolísticamente en el Barça ha conseguido colgar las botas en el club de sus amores. La única excepción en estos treinta años ha sido Carles Puyol, que dejó el fútbol, su gran pasión, y el club de sus amores, el Barcelona, tras 15 años en el primer equipo azulgrana, que le bastaron para forjar su leyenda como uno de los hombres que para siempre figurarán en la historia del Barça.
Ejemplos destacados de canteranos ilustres que terminaron sus carreras lejos de casa fueron Pep Guardiola, quien se retiró tras un breve periplo en el Dorados de Sinaloa mexicano, donde recaló tras militar en Brescia, Roma y Al-Ahli; Guillermo Amor, que dejó el fútbol en el Livingston FC escocés, o los ex defensas Albert ‘Txapi’ Ferrer y Sergi Barjuan, quienes terminaron sus periplos como futbolistas en el Chelsea y en el Atlético de Madrid, respectivamente.
En Can Barça se producen y mejoran muchos jóvenes talentos cada año, pero no todos pueden llegar a consolidarse en el primer equipo durante más de cuatro o cinco temporadas. Los Cristian Tello, Giovani Dos Santos, Thiago Motta, Sergio García, Nolito, Verdú, Mikel Arteta, Bojan Krkic, Cesc Fábregas o el mismo Gerard Piqué salieron en algún momento de sus carreras para probar suerte en otros destinos donde creían que tendrían más oportunidades, pues el fútbol no termina en el Camp Nou.
Paulino, uno de los primeros ídolos azulgrana
Hay que remontarse muchos años atrás para recuperar los últimos precedentes de jugadores formados y retirados en el Barça, pues la tónica seguida por muchos de los últimos canteranos históricos del club azulgrana ha sido, como se ha visto antes, por un motivo u otro, terminar sus carreras futbolísticas lejos del Camp Nou.
La mayor parte de los casos de jugadores cuyas carreras íntegramente transcurrieron en Can Barça se remontan a las cinco primeras décadas del siglo XX, cuando las carreras profesionales de los futbolistas acostumbraban a ser más breves, y no había tantos movimientos de jugadores entre clubes. Fue especialmente a partir de los años 50, con la expansión y profesionalización del fútbol, cuando estos casos empezaron a decrecer hasta casi extinguirse en can Barça.
Uno de los primeros en lograrlo, en los años 20, fue el considerado como la primera figura mediática de la historia del club, el nacionalizado español de origen filipino, Paulino Alcántara. Fichado por el entonces presidente Hans Gamper, fue apodado el 'Romperredes' por su facilidad anotadora. Sus 369 goles en 357 partidos le colocan como el máximo goleador de la historia del FC Barcelona, a pesar de que la mayoría de ellos los hizo en partidos no oficiales, pues se retiró en 1927, un año antes de la creación de la Liga española. En sus quince temporadas en la ciudad condal, fue importante en la consecución de cinco Copas de España y ocho campeonatos de Catalunya. Únicamente hizo un paréntesis de dos años lejos del Barça, en los que viajó a su país natal para empezar a estudiar Medicina, una profesión que más tarde compaginó con el fútbol.
Serrat y Les Cinc Copes
Estanislao Basora siguió la tradición. Considerado uno de los mejores 50 futbolistas españoles de la historia, el 'Monstruo de Colombes', como le llamaba la prensa francesa por un triplete a Francia en quince minutos, debutó con 20 años, y fue un veloz extremo derecho con notable capacidad pasadora que participó en ‘Barça de les Cinc Copes’. En aquel equipo, formó un ataque temible junto a César, Kubala, Moreno, Manchón o el recién fallecido Biosca, jugadores inmortalizados en la canción Temps era temps de Joan Manel Serrat. Tras 14 temporadas de azulgrana, se consolidó como una de las leyendas del club.
Otro de los mitos de aquel equipo fue Joan Segarra, defensa central y comodín que se adaptaba a las necesidades del equipo gracias a su destacada polivalencia. Pese al tiempo en el que le tocó jugar, destacó por su habilidad por sacar el balón jugado con elegancia, algo atípico en aquella época. Segarra capitaneó al ‘Barça de les Cinc Copes’ durante varias de las dieciséis campañas en las que militó en el club, unas temporadas en las que tuvo el honor de levantar 17 títulos, entre ellos cuatro Ligas españolas y seis Copas del Generalísimo. Igual que Rexach, su apellido se encuentra entre los diez que más encuentros han jugado con la zamarra culé.
Parecido recorrido en el club tuvo Sígfrid Gracia, quien empezó tres cursos más tarde que Segarra, en 1952, y se retiró un año después, en 1966. Durante esas 14 temporadas, Gracia despuntó siendo un lateral zurdo, paradigma de regularidad, constancia y seguridad, cualidades que lo hicieron imprescindible para sus entrenadores. Alejado de cualquier polémica, siempre mantuvo una relación cordial con el club, al que defendió desde la honradez y el esfuerzo, ganándose el respeto de todos. Su extraordinaria capacidad de sacrificio lo elevaron como uno de los más destacados futbolistas azulgranas de los años cincuenta.
A mediados de aquella misma década empezaron a jugar en el primer equipo dos hombres que compartieron año de debut. Fue en 1956, cuando Martí Vergés, centrocampista, y Ferran Olivella, central, empezaron a jugar en el Camp de les Corts, que vivía el último año de uso del Barça, que al año siguiente se trasladaría al Camp Nou. Ambos formaron parte del equipo que, de la mano de Antonio Ramallets, Laszlo Kubala, Luis Suárez o los mencionados Sígfrido Gracia y Estanislao Basora, dieron al club azulgrana una de las mejores generaciones de su historia.
Antes de su retirada, a finales de la década posterior, tanto Vergés como Olivella pudieron disputar varios cursos con otras dos leyendas azulgranas que disputaron íntegramente sus carreras en el mismo club. El primero de ellos, Salvador Sadurní, fue un guardameta que, con sus dieciséis temporadas en el club, igualando la marca de máxima longevidad azulgrana, un récord que alcanzó siendo uno de los mejores porteros de Europa de la época. Tres torneos Zamora, algo tan sólo superado por Antoni Ramallets y Víctor Valdés, dan fe de la trascendencia de Sadurní. Sólo Ángel Iríbar, en la selección española, fue capaz de desterrarlo al banquillo.
Uno de los más notables y valiosos escuderos de Sadurní fue el lateral diestro Joaquim Rifé, que siguiendo el testigo de Segarra, fue el capitán de su generación en el Barça. Tras 401 encuentros repartidos en trece cursos, este defensa se distinguió por su infatigable vocación ofensiva, un legado que nunca olvidó de sus inicios como extremo y luego de medio volante. Rifé, que se retiró en 1976, fue de los últimos futbolistas singulares de una especie que, por el momento, terminaron con Rexach en 1981.
Los últimos de la lista
A la lista de los mencionados, habría que añadirles otros casos menos destacados, como Patrici Arnau, Ramón Campadabal, Joan Font Mañé, Ramón Guzmán, Romà Forns, Joan Ramón i Pera, Eduardo Reguera, Francisco Rodríguez García, Manuel Parera, Josep Sastre, Sagi-Barba, Juan Uriach o Vicente Saura, entre otros muchos, que también estuvieron toda su vida vistiendo de azulgrana y colgaron las botas en el club que les vio nacer deportivamente.
Una lista de leyendas de la que Víctor Valdés no podrá formar parte, pues el meta se desvinculó del club azulgrana el pasado verano, y podría firmar con algún club extranjero en breve. Los próximos que podrían pasar a engrosar la lista podrían ser Xavi Hernàndez, si en enero o en verano de 2015 no emigra rumbo a los Estados Unidos o Qatar, Andrés Iniesta o Lionel Messi.
