El presidente culé no ocultó su felicidad tras haber avanzado a la primera final de la temporada: "Llegar a una final era el objetivo de esta temporada". Además, no desmereció al rival y destacó su buen desempeño: "A pesar del resultado, el Villarreal ha hecho un gran partido".
Por otro lado, mostró una confianza plena en el entrenador: "Luis Enrique tiene un año más de contrato. Seguro que el año que va a llevar al equipo sea quién sea el presidente".
Sobre la lesión que Busquets sufrió en el partido de esta tarde, agregó: "Creo que tendrá una recuperación un poco lenta, no se ha roto nada pero tendremos que ver las pruebas".
Por último, dio a conocer su postura acerca del lugar donde se jugará la final del certámen: "No quiero que la final sea el Camp Nou, nadie quiere jugar en casa". Con respecto a los estadios posibles, agregó: "Puede ser el Bernabéu, Mestalla, San Mamés o el Calderón”. "Pediremos un campo grande y con mucha capacidad. A los aficionados del Barça les gusta viajar a las finales para disfrutar de la fiesta”, finalizó.