Lucas Alcaraz apareció cabizbajo en sala de prensa para dar la cara tras la eliminación de su equipo ante el modesto Alcorcón, que marcha catorceavo en la Liga Adelante.

El entrenador granadino expresó que "ha sido un partido de mucha alternancia”, pero que “no hemos tirado en la primera parte y hemos sido incapaces de hacer un gol".

"En este tipo de eliminatorias o marcas o se envenenan. Ellos tenían poco que perder y nosotros mucho que perder", aclaró Lucas Alcaraz. A lo que añadió que “era un partido que teníamos que jugar con la máxima intensidad".

El entrenador se sinceró y pidió perdón a la afición “culpables somos todos”, al tiempo que añadía que “cuando hay victorias los granitos de arena los ponemos todos, cuando hay derrotas también".

El entrenador del conjunto nazarí reconoció que "el presidente nos hizo saber que la copa era importante. Hemos fallado", si bien apuntó que "nuestro objetivo en la Copa era más económico que otra cosa, en virtud a los cruces virtuales, pero es una decepción".

Por último, Lucas Alcaraz quiso dejar constancia de la dureza del partido, explicando por un lado que "sabíamos que había jugadores que podían acusar el cansancio”, por ejemplo Piti, que “ha jugado toda la prórroga mermado. Hemos jugado con 10 unos 40 minutos de los 120", y que por este motivo, la dureza y el cansancio arrastrado, “el partido de hoy va a afectar al partido del sábado. Hay jugadores que han terminado mermados. Hay que tomar decisiones"