El entrenador del Granada CF, Joaquín Caparrós, ha analizado cómo afronta su equipo el partido de este viernes contra el Rayo Vallecano en el Nuevo Los Cármenes tras el parón en Liga. Para el utrerano, anímicamente tienen que llegar bien ya que considera que el estado anímico no puede estar "en función de las rachas positivas o negativas" porque "el profesional es aquel que desconecta".
Caparrós ha asegurado que el Granada tiene "un buen grupo, que está unido" y ha destacado que son muy conscientes de que tienen que jugar mejor que el Rayo Vallecano, pues tienen que conseguir la victoria en un partido "muy importante".
"El Rayo es un equipo parejo a nosotros"
El míster del equipo rojiblanco ve al Rayo como un equipo "muy parejo" al Granada, "que fuera de casa está haciendo las cosas muy bien". "Somos conscientes de eso, necesitamos ganar y queremos hacer un buen partido y darle una alegría a nuestra gente", ha asegurado. También ha dicho que el equipo de Jémez "sabe lo que tiene que hacer cuando tiene el balón y cuando no".
El técnico utrerano podrá contar con Murillo y Foulquier, que solo han entrenado este jueves tras estar con su selección, aunque no con Luis Martins, quien ha vuelto con molestias. Caparrós ha señalado que cuando van con su selección prefiere que jueguen. También podrá disponer de Jhon Córdoba, pese a perderse algunos entrenamientos esta semana debido a que se marchó a su país, Colombia, para realizar unos trámites. " Ayer ya estuvo entrenando con Morcillo y lo hizo bien", ha comentado.
Cuestionado sobre las declaraciones que Piti hizo esta semana en las que aseguraba que se sentía más cómodo jugando más arriba, Caparrós ha evitado cualquier tipo de polémica y ha asegurado que está de acuerdo con todos los futbolistas. "Escucho hasta de Messi decir a su entrenador que está recuperando su aspecto defensivo. Ofensivo y defensivo, yo no conozco eso. Sí su actitud, comportamiento. Un equipo tiene que saber lo que tiene que hacer cuando tienen el balón y cuando no, movernos para buscar los espacios, es la ley del fútbol. Es muy fácil decirlo y muy complicado interpretarlo”.