El Levante no aguanta la tormenta en el Camp Nou

El conjunto granota llegó a la ciudad condal con la intención de plantar cara y despedir la competición con una buena imagen. Finalmente, no lo pudo conseguir ante la pegada de los catalanes.

El Levante no aguanta la tormenta en el Camp Nou
Cesc Fábregas celebra el quinto ante la decepción de los defensas granotas. / FOTO: Reuters
rubengarcia
Por Rubén García González

El Levante despidió la Copa del Rey en el Camp Nou con una dura derrota. Empezó bien el equipo dirigido por Joaquín Caparrós, que se adelantó gracias a un cabezazo de Vyntra rebotado en la espalda de Sergi Roberto, pero la pegada de los culés pudo más y el equipo barcelonés acabó arrollando a los de Orriols en una noche marcada por la intensa lluvia y la baja asistencia al coliseo azulgrana.

Una primera parte satisfactoria

No lo hicieron mal los granotas, que iniciaron el partido con gran intensidad y concentración, seguros atrás. Mientras el Barça ponía la posición y el juego, el Levante aguantaba las embestidas y esperaba su momento para el contraataque.

El conjunto local dispuso de las ocasiones más claras, aunque el Levante no sufrió excesivamente en el primer tiempo. Ya en el minuto 4 empezaron avisando los del Tata Martino, con una ocasión de Tello que salvaba Javi Jiménez. Pero serían los de Orriols quienes golpearían primero.

En el minuto 8 llegaría la alegría para el bloque visitante; Vyntra cabeceaba un saque de esquina, el balón rebotó en la espalda de Sergi Roberto variando así su trayectoria y despistando al portero barcelonista, Pinto, que sólo pudo ver cómo entraba. El Levante se adelantaba.

El Barcelona no se vino abajo y siguió con su juego de toque, aunque sin hacer gala de una gran profundidad; llegaban poco y los granotas se sentían cómodos en defensa. Seguían haciendo gala de una gran convicción y determinación.

En el minuto 16 el Barça volvió a morder en una ocasión clara de Sergi Roberto, que remató de primeras un pase de la muerte de Montoya y que acabó fuera.

No obstante, la calidad de los jugadores locales afloró en el minuto 27, cuando un disparo imparable de Adriano, llegado desde fuera del área, aprovechó el muro de jugadores que restaba visión al guardameta levantinista y puso el empate de nuevo en el marcador.

El golazo del brasileño no hizo decaer al Levante, que siguió peleando y poniendo a prueba su físico, al tiempo que mantenían un buen nivel táctico.

Pero el gol de Puyol antes del descanso cambiaría el partido y haría cundir el desánimo en las filas granotas. En el saque de un córner el defensor culé remataba a la perfección y adelantaba por fin al Barça. 2-1 en el casillero, justo antes de ir a la caseta.

Iniesta, Alexis y el bajón anímico granota

El Levante salió con otra cara tras el descanso. Intentó mantener la línea de la primera parte, pero le fue imposible. El gol de Puyol había hecho mucho daño. A ello se le sumó la entrada de Andrés Iniesta, quien revolucionó el juego con su calidad.

El hambre de goles no cesó en ningún momento de la segunda parte para los del Tata Martino, y sólo la fortuna evitó una goleada mayor.

Dos goles de Alexis, a los 4 y 6 minutos del inicio del segundo tiempo, acabaron de hundir a los de Caparrós. El primero llegó tras un pase entre líneas de Tello a Montoya, quien picó un balón que Javi Jiménez no pudo blocar; Alexis aprovechó para empujarla a placer, solo ante el marco.

El segundo del chileno vino tras un nuevo chut de Adriano desde fuera del área. Éste rebotó en dos ocasiones –en la defensa y en el propio guardameta– para ir al larguero. El atacante tuvo la picardía de buscar el balón y terminar la jugada que él mismo había empezado con un pase previo al brasileño.

Tras esto, el Barça llevaba ya cuatro tantos. La eliminatoria era más que imposible para los granotas, por lo que el técnico utrerano optó por un cambio defensivo con la intención de evitar una mayor sangría. Así, se iba Ángel y entraba Pallardó.

Los de Orriols aún tendrían una nueva oportunidad de meterse en el partido, tan sólo 8 minutos más trade. Pedro Ríos fallaba una gran ocasión a pase de Nagore. El jerezano estaba prácticamente solo ante la portería a y la tiró por arriba. La última oportunidad de caer con dignidad ante un club de gran entidad se desvanecía.

Pero el Barcelona no lo había dicho todo; en el minuto 63 Alexis estuvo a punto de llevarse el hat trick tras un mal saque de Javi Jiménez –que no tuvo su día–. Le robó la cartera al guardameta, quien pudo enmendar su error llegando a tiempo antes de que el atacante pudiese rematar.

Cesc Fábregas pondría el 5-1 sólo cuatro minutos más tarde de esta jugada. El segundo tiempo y en especial los últimos minutos del encuentro se caracterizaron por un dominio total del conjunto culé ante un Levante cada vez más decaído.

La parte positiva

La mejor noticia en el equipo de Orriols fue el buen rendimiento del canterano Jordi César, a quien Caparrós obsequió por sus esfuerzos dándole minutos y, nuevamente, una buena actuación de Camarasa, otro canterano de gran proyección.